Reino Unido tendrá que devolver los mármoles del Partenón a Grecia por el Brexit

Grecia e Italia introdujeron una cláusula en el borrador del acuerdo del brexit entre la Unión Europea y el Reino Unido que podría obligar a Londres a devolver los mármoles del Partenón, entre otras muchas obras. Actualmente, esta pieza se encuentra en el Museo Británico, y aunque ha sido reclamada por Atenas desde hace tiempo y en varias ocasiones, nunca ha logrado recuperarla.

La claúsula indica que las partes reconocen las demandas relativas al retorno de objetos culturales que habían sido retirados ilegalmente de los países de origen. En este texto no se especifica las obras culturales, pero cabe esperar que los restos del Partenón sea una de ellas. Una pieza de incalculable valor que data del año 443 antes de Cristo.

Ya en septiembre, el primer ministro griego, Kiriakos Mitsotakis, solicitó a Boris Johnson que devolviera los frisos en el año 2021, a cambio le ofrecía una exposición en Londres de tesoros de la Antigua Grecia que no han salido nunca del país helénico.

El origen de la disputa comenzó a principios del siglo XIX, cuando Grecia había sido invadido por el imperio turco-otomano. Entonces, el séptimo conde de Elgin, que trabajaba a las órdenes del sultán Selim III, ordenó retirar las piezas del Partenón, bajo extrañas circunstancias, de hecho, se dice que la firma del sultán fue falsificada. Como consecuencia, el conde se hizo con piezas que vendió al estado británico por un valor de 35.000 libras de la época. Un dineral.

Evidentemente, Grecia se lo tomó como un robo y acusa al gobierno británico de no devolver esta parte de su historia, incluso 200 años después. En el año 2009, Grecia erigió un monumento enorme para tapar el hueco que dejaron las piezas “robadas”, esperando que algún día puedan colocar las piezas legítimas.

En cualquier caso, desde Grecia han vuelto a la carga con este asunto después de conocer los resultados del “brexit” y su salida de la Unión Europea. Es, según ellos, el clima ideal para que el resto de europeos apoye su causa y reclame a los británicos los restos de historia que no le pertenecen.