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Música

Entrevista

Raphael habla en exclusiva con LA RAZÓN: “La media naranja existe, pero hay que evitar que se pudra”

El cantante reflexiona sobre su productividad durante la pandemia, su carácter romántico y el eterno calado de su carrera

El cantante Raphael
El cantante RaphaelDavid BorratEFE

Si existe la receta de la eterna juventud, seguro que Raphael conoce sus ingredientes. También de la ecuación del éxito. Y es que el de Linares desafía a lo establecido con dosis insaciables de arte y simpatía. No hay generación que se le resista ni conciertos que deje a medio llenar. Él, humilde, sigue dudando si cada día hará pleno. Este verano está de aniversario y por partida doble: 60 años sobre los escenarios y 49 años de casado. También nos habla del éxito para ser infalible en el amor.

-Ha sido de los primeros en reencontrarse con el público, ¿tenía mono?

-Siempre que vuelvo de viaje o de donde sea y me encuentro con mis compatriotas es algo maravilloso. Eso sí, ahora ha sido con más cuidado para que todos estemos tranquilos y no ocurra nada.

-De hecho, su primer concierto fue un tanto polémico, pese a su defensa de que el consumo de cultura es seguro...

-Si las cosas se hacen bien, no hay problema. La gente está más segura en un concierto que de botellón. En mis conciertos, los asistentes bailan, se ponen de pie, pero cada uno desde su sitio. Es algo diferente a lo que se hacía antes, pero el entusiasmo es el mismo. En los conciertos, la gente no bebe ni se pasa la botella de unos a otros...

-Veo que no le gusta mucho el botellón... ¿Estamos siendo demasiado duros con los jóvenes que no renuncian a la fiesta pese a la vulnerable situación que vivimos?

-Los jóvenes sí que escuchan cuando se les dicen las cosas, pero es más comercial echarles la culpa de todo. Lo que hay que decir es que habrá muchos días en el futuro para hacer botellón. Ahora no.

-¿Le ha sido productivo este tiempo «monacal» de encierro e introversión?

-Sí, he grabado tres discos y he puesto el broche de oro a mi carrera, pero no se conocerá el contenido hasta que me vaya...

-¿Una cápsula del tiempo?

-Cuando algún día me vaya, porque me tendré que marchar aunque no tengo ninguna prisa, quiero que las cosas estén preparadas, para no dar demasiado trabajo. Soy muy organizado. Eso sí, en mi orden también existe la locura de la desorganización. Del caos siempre salen cosas más limpias.

-¿El 6.0 con el que juega para promocionar su gira de 60 años sobre el escenario es una advertencia de que el 3.0 ya es cosa del pasado? ¿Estamos ante un Raphael futurista?

-Yo nunca he estado en el pasado, no soy nada nostálgico. Si me apuras tampoco estoy en el presente, soy un hombre del futuro. Me encanta pensar en qué voy a hacer mañana porque el día de hoy ya está hecho.

-¿Se maneja bien con las tecnologías?

-Me gustan las redes sociales, son divertidas e informativas. Puedes echar el rato sin hacer daño a nadie. Aunque tengo un equipo que me ayuda, yo soy el que tiene siempre la última palabra de lo que se publica en el perfil, no se vaya a poner alguna pendejada.

-El estilo Raphael es indiscutible, ¿fue usted el primer influencer?

-Una cosa es ser influyente y otra «influencer», una cosa es seria y la otra es para divertirse. Yo nunca me he considerado influyente, pero entiendo que haya gente a la que le guste seguir mis pasos y, sinceramente me halaga. Dejar huella es siempre bonito.

-En mi casa Raphael sonaba con frecuencia y ahora mi primo pincha su música con los amigos. ¿Inventó usted la transversalidad?

-No sé como se produce esa metamorfosis generacional. Fíjate, no suelo mirar al público antes de salir al concierto, pero en una ocasión, en un concierto en Huelva, le pregunté a mi manager que cómo estaba de gente. Me dijo que lleno, pero le respondí: ‘’No, me refiero a qué tipo de gente’'. Él me contestó que me asomara. Al hacerlo vi que había personas desde los ocho años a todos lo que te puedas imaginar. Me quedé alucinado y muy contento.

-Hace unos días, hacía un homenaje en las redes a su esposa por sus 49 años de casados. ¿Existen las medias naranjas o es un cuento?

-Claro que existen, pero si no se cuidan se pudren. Así que si tienes la suerte de encontrarla mi consejo es que no dejes que se pique ni que se seque. Cuídala. Lo que crece con los años hay que saber mantenerlo.

-¿Es romántico?

-Imagino que a veces sí y otras no. Pero también tengo lo mío, no te creas. Cuando me enfado se me va la fuerza por la boca.

-¿Su matrimonio es su mayor éxito?

-Mi familia es lo más maravilloso. He tenido mucha suerte. Al igual que con la música y mi voz, la cual el día que se vaya o amague con irse... Hasta entonces, yo estaré siempre ahí.