Investigan la compra de una antigüedad robada que fue adquirida “de buena fe” por Paloma Botín

Paloma Botín y su marido Ricardo Gómez-Acebo, marqués de La Deleitosa, son objeto de una investigación sobre la posible compra fraudulenta de una antigüedad fechada en el siglo VI a.C. La obra en el centro de la investigación es una escultura de una leona ibérica que Botín compró a un anticuario anónimo español, según “El País”.

La evidencia de que la escultura se había comercializado de forma ilícita se descubrió durante una redada realizada por la Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía Nacional Española en 2018 que resultó en el arresto de dos comerciantes de arte en Barcelona. Luego de una orden judicial, el artefacto fue incautado de un almacén donde lo tenían los Botín. Los dos comerciantes y los tres presuntos participantes fueron arrestados por importar ilegalmente obras de otros países, incluidos mosaicos y artefactos egipcios.

Después de ser investigados y proporcionar documentación de que la pareja compró la escultura de “buena fe”, un juez permitió que la pareja compareciera en el juicio judicial como “partes lesionadas”. La documentación proporcionada por la pareja que detalla el historial de venta de los objetos ahora se está revisando para verificar su autenticidad. La pareja podría ser elegible para buscar una compensación si el tribunal decide que la venta de la escultura fue fraudulenta.

La familia Botín ha cimentado su reputación entre los coleccionistas y banqueros más importantes de España. La Fundación Botín, que comenzó a coleccionar arte en 1993 como parte de su filantropía artística, inauguró el Centro Botín, un museo privado diseñado por Renzo Piano en Santander, en 2017. Acumulada durante los últimos 25 años, la colección se especializa en arte contemporáneo y contiene obras de pintura, escultura, dibujo, video y fotografía de artistas internacionales.

Paloma, sin embargo, no es el único miembro de la familia Botín involucrada en la polémica, ya que Jaime Botín, su tío, intentó pasar de contrabando un retrato de Picasso valorado en aproximadamente 27,4 millones de dólares que había sido declarado tesoro cultural por la Corte de la Nación española en mayo de 2015 y cuya exportación estaba prohibida. Fue juzgado en noviembre de 2019 y el fiscal busca una sentencia de cuatro años de prisión además de una multa de 100 millones de euros.