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"Descolonización" en España

Comunidades del PP critican la "ocurrencia" de Urtasun sobre descolonización de museos y C-LM lo apoya

Las autonomías, contra la «descolonización» de Urtasun: las competencias en materia cultural están transferidas y los museos dependientes de las comunidades autónomas no pueden "sufrir injerencias"

Se extiende a lo largo de nuestra geografía un patrimonio cultural y artístico incomparable. Del recorrido histórico español surge un valioso legado cuya conservación depende de espacios que están en muy buen estado de salud: de esa protección, entendimiento y cuidado depende el sentido crítico de la sociedad. Saltan, por tanto, las alarmas, cuando este patrimonio se ve sometido a algún tipo de revisión, cambio, análisis o juicio. Ernest Urtasun, ministro de Cultura, las hizo sonar el pasado lunes, tras plantear entre sus líneas maestras para la presente legislatura «un proceso de revisión de las colecciones que permitan superar un marco colonial o anclado en inercias de género o etnocéntricas que han lastrado, en muchas ocasiones, la visión del patrimonio, de la historia y del legado artístico», pronunció.

Las diferentes Consejerías de Cultura de las Comunidades Autónomas comienzan a pronunciarse al respecto. Ayer Vicente Barrera, conseller y vicepresidente primero de la Generalitat, acusaba a Urtasun de «comprar la leyenda negra» de España al hablar de «descolonización» cultural,y justificó por qué ello le producía una «profunda preocupación». Si bien advertía que «las competencias de cultura están transferidas a las comunidades», insistía en su voluntad de actuar «como un dique de contención contra esta política cultural ‘‘woke’’ y de falta de libertad y pluralidad cultural que parece que quiere imponer el nuevo ministro».

Barrera matiza a este diario dichas intenciones, explicando que «estamos centrados en dar apoyo, conservación y promoción a nuestra historia, patrimonio, tradiciones y cultura en la región, colaborando con entidades y colectivos que acrediten su compromiso con nuestro legado». Añade que, de momento, «estamos a la espera de que el ministro se exprese mejor y más en profundidad, ya que pensamos que si tuviéramos que aplicar esa ‘‘descolonización’’ de la que nos habla y todo lo que implica, tendríamos que cerrar muchos museos de nuestra región o retirar algunas obras, y eso sería una completa censura, ¿no creen?».

Distracción o inercia

A este rechazo se unen otras Comunidades lideradas por el Partido Popular, como es el caso de la de Madrid, donde también se encuentran a la espera de que «se explique en qué consiste exactamente, y entonces lo analizaremos», y hasta ahora lo consideran como una estrategia «para distraer de la amnistía». Desde la Consejería de Turismo, Cultura, Juventud y Deporte de Murcia califican las intenciones de Urtasun como «una nueva ocurrencia fruto de su profundo desconocimiento de la historia de España. Lo último que necesitamos son debates importados de otras sociedades». A la espera, de nuevo, de novedades al respecto, en Murcia también se percibe como «inviable» asumir esta administración «sin que se otorgue la financiación adecuada y necesaria para su desarrollo y protección». Este diario ha intentado contactar con Castilla y León o Andalucía para conocer sus posturas al respecto, pero hasta ahora no se han pronunciado.

Ha sido Castilla-La Mancha, gobernada por el PSOE, la primera en pronunciarse a favor de este aspecto de las líneas maestras del Ministerio. Amador Pastor, consejero del PSOE de Educación, Cultura y Deportes, ha afirmado que se trata «de una cuestión de inercia natural y de evolución», así como ha indicado que se trata de un trabajo «que se viene haciendo desde hace tiempo. La fortaleza grande que hemos tenido siempre es que en los recursos del Estado que tienen los territorios y que gestionamos desde los gobiernos regionales ha habido entendimientos en los avances». En cuanto a Urtasun, sus últimas intervenciones al respecto han defendido que dicha «descolonización» se lleva haciendo «desde hace mucho tiempo» tanto en España como en países de Europa. Deja atrás la anteriormente utilizada palabra «revisión», y matiza que la intención del ministerio «simplemente» tiene que ver con ir actualizando la museografía, «porque hay nuevas miradas».