60 años después de su asesinato, ¿Malcolm X se habría convertido al "wokismo"?
Defendió durante años que los negros eran la encarnación de los buenos valores; enfrente, entendía a los blancos como una raza explotadora que representaba la maldad


Madrid Creada:
Última actualización:
Cuando se dice que vivimos ahora en tiempos muy complejos en realidad se está repitiendo lo que otras personas dijeron de la época que les tocó vivir. Nada nunca fue fácil. Un buen ejemplo es la vida de Malcolm X, nacido como Malcolm Little. Este 19 de mayo se cumplen cien años de su nacimiento, y murió asesinado el 21 de febrero de 1965, antes de cumplir los cuarenta.
Durante su vida sufrió muchos y profundos cambios. La infancia de Malcolm fue la de los años de la depresión por el Crack del 29 y del crecimiento por el New Deal. Esa resurrección de Estados Unidos no fue igual para los negros. Malcolm pasó su adolescencia en el gueto de Roxbury, en Massachusetts. En esos años convulsos en lo político, social y laboral, su padre fue asesinado en uno de los numerosos conflictos generados en el mundo del trabajo. La administración decidió retirar la custodia de sus hijos a la madre de Malcolm. El resultado fue que ella acabó ingresada en un psiquiátrico. En esa infancia triste y desestructurada, Malcolm estuvo en varias casas de acogida de Harlem. Es bueno recordar aquí que esas familias de acogida recibían un dinero por cada niño que albergaban en su casa, por lo que careció de amor durante su infancia y adolescencia.
Sin referencias familiares ni valores, Malcolm ingresó en una banda de ladrones que se dedicaban a desvalijar apartamentos, a traficar con droga y a atracar. Su apodo era «Detroit Red», en referencia a su pelo de color rojo. Fue detenido por unos atracos a familias ricas blancas, y condenado a pasar en prisión entre 8 a 10 años. En esos años Malcolm tuvo contacto con los seguidores de Elijah Muhammad, el líder de la Nación del Islam. Esta organización era un movimiento afroamericano que combinaba el islamismo con el nacionalismo negro. Este ideario presentaba al islam como una religión de liberación de los negros frente a los blancos, a los que identificaba con la esclavitud, la injusticia el odio, la avaricia y la mentira.
Malcolm salió de la cárcel en 1952. Pasó en prisión seis años. A partir de entonces se dedicó plenamente a la Nación del Islam. Fue entonces cuando cambió su apellido por una X que simbolizaba el desconocimiento del nombre de sus ancestros provenientes de África. Su activismo se tradujo en la creación de templos para la organización en Nueva York, Filadelfia, Boston y en algunas ciudades del sur de Estados Unidos. Además, se dedicó al proselitismo a través de sus discursos en mítines callejeros y salones. En su afán de propagar las ideas de la Nación del Islam para la liberación de los negros en Estados Unidos y contra los blancos, fundó el periódico «Muhammad Speaks», que era vendido en la calle por los seguidores de la organización. Sus ideas provenían de la mezcla del islam con el nacionalismo negro, lo que se traducía en la superioridad de los afroamericanos sobre los blancos, en una mezcla de victimismo, anticristianismo y reivindicación moral y política. Los negros eran la encarnación de los buenos valores, y los blancos una raza que se sabía aprovechado de los negros con una estructura de explotación económica, cultural y religiosa, y que, por tanto, representaba la maldad.
En aquellos años del movimiento por los derechos civiles que fue la década de 1960, la diferencia con Martin Luther King fue más que evidente. Malcolm reivindicaba la superioridad de los negros sobre los blancos, mientras que Luther King exigía la igualdad entre hombres y blancos y el pleno acceso a los derechos civiles por parte de los ciudadanos afroamericanos. El movimiento que lideraba Malcolm X engendraba violencia y era antisistema, mientras que el de Luther King era un llamamiento a la paz y a participar en las instituciones. Además, este era cristiano, y Malcolm X se había convertido al islam.
Ese nacionalismo negro se basaba también en el orgullo por lo que llamaron «cultura negra». De esta manera unieron activismo y arte, influyendo en el «Black Arts Movement», de exaltación de la negritud y de su cultura como identidad colectiva. Su objetivo era separar a los negros de la cultura norteamericana, y acercarlos a sus raíces africanas. Malcolm X también tuvo una gran influencia en el Partido Pantera Negra, que era una organización nacionalista, socialista y revolucionaria que funcionó entre 1966 y 1982, y que se caracterizó por la autodefensa violenta si hacía falta.
El activismo de Malcolm X consiguió que Nación del Islam pasara de 400 miembros en 1952, a tener 40.000 en 1960. Sin embargo, hubo dos acontecimientos que cambiaron a Malcolm X. El primero fue que Elijah Muhammad había engañado a su mujer teniendo hijos con seis de sus secretarias personales, lo que era una violación del código moral del movimiento. Lo segundo fue su viaje a La Meca y a otros países islámicos, e incluso a la Unión Soviética. Allí descubrió que la solución no era hacer la guerra a los blancos y se adhirió al islam suní. El resultado fue que dividió Nación del Islam y fundó en 1965 la Organización de la Unidad Afroamericana, encaminada a la paz y la participación de los negros en el sistema para la defensa de los derechos civiles y humanos. Esto generó muchos conflictos entre los miembros de Nación, lo que llevó al asesinato de Malcolm X.
Disparo a quemarropa
El 21 de febrero de 1965 iba a pronunciar un discurso en un salón de Broadway, en Nueva York, en un acto de su organización. Fueron a escucharle unas 400 personas. Según un periodista asistente al acto, Malcolm X tomó el micrófono, saludó al público, y en ese momento, con sus guardaespaldas distraídos, se acercaron unos hombres que dispararon a quemarropa al líder de la organización. Todo apuntaba a hombres de Nación del Islam. A los pocos días fueron detenidos tres de sus miembros. Mujahid Abdul Halim confesó haber cometido el crimen pero declaró la inocencia de los otros dos acusados. Sin embargo, los tres fueron declarados culpables e ingresaron en prisión. A partir de ahí la figura de Malcolm X se convirtió en un mito de la lucha de los negros por los derechos civiles en Estados Unidos.
Tras el asesinato las dudas sobre la autoría se dispararon, como ocurrió con JFK y Martin Luther King. Una parte acusó al FBI de querer descabezar la lucha por los derechos civiles en Estados Unidos, y otros lo atribuyeron a batallas por el poder dentro de la organización.