Entrevista

Morat: ¿dónde quedaron los solos de guitarra?

Lanzan el EP «Antes de que amanezca» como una manera de mantenerse en forma y de profundizar en el concepto de su gira

Entrevista a Morat, banda colombiana de Pop.
De izda. a dcha., por arriba, Juan Pablo Isaza y Juan Pablo Villamil; por abajo, Simón Vargas y Martín VargasAlberto R. RoldánLa Razón

Lo contracultural y revolucionario ya no parecen ser los ritmos frenéticos, las alusiones morbosas o los perreos hasta el suelo. Que la RAE haya adquirido en su diccionario el término chunda-chunda, hace pensar que lo urbano y el reguetón se van ganando cada vez más hueco entre la música popular y comercial. Mientras tanto, el pop-rock y derivados resurgen como el contrapunto, incentivando la importancia del mensaje profundo y pausado en una época en la que pocos segundos audiovisuales nos bastan a la hora de consumir música. Morat fija ahí su razón de ser y su equilibrio. En ese contrapunto a lo instantáneo del «reel», apoyándose en cultivar conceptos. La banda colombiana, formada por Juan Pablo Isaza (voz y guitarra), Juan Pablo Villamil (guitarra, bajo y voz), Martín Vargas (percusión y coros) y Simón Vargas (bajo y coros), cuenta con su propia fórmula: «Es importante dar a nuestros proyectos una justificación profunda. Hoy en día competimos con gente que saca una canción cada dos semanas, y quizá nuestro valor agregado no está necesariamente en la comercialidad. Lo que tenemos que hacer es valorar y contar una historia, que la gente pueda rascar la canción y ver más allá, que encuentre algo».

"A la larga, la Inteligencia Artificial será más una herramienta que una suplantación"

Morat

Tratan de mantenerse entre el estándar más purista, como es el sonido de un instrumento en un directo, y el entorno, «porque no hay que desconocer las novedades que hay día a día». Son conscientes de que «si sacamos un single con un solo de guitarra de cuatro minutos, la gente no lo va a aguantar. Si lo que queremos es reivindicar un instrumento, hacer eso en tiempos de Tik Tok es como pegarse un tiro al pie». Se definen como «una banda de músicos colombianos conscientes», y este último adjetivo no lo escogen en vano, pues «tenemos que empatizar con el ambiente, tener la capacidad de relacionarnos». Y el objetivo del EP que acaban de lanzar, «Antes de que amanezca» –con seis nuevas canciones–, navega en este sentido.

Robustecer un concepto

Si fuera por Morat, «estaríamos girando un buen tiempo sin sacar música durante uno o dos años, y después sacaríamos el siguiente disco». En 2022 lanzaron el último, el cuarto en su discografía, «Si ayer fuera hoy», y desde entonces han recorrido Latinoamérica o España de concierto en concierto. Pero «entendemos que hoy en día la industria no funciona como nosotros querríamos. Y este EP responde a esa necesidad de sostener un ritmo de lanzamientos más veloz. Pero también nos sirve para darle fondo y concepto a la gira que vamos a tener el próximo año, que sigue la idea de los sueños, de la noche, de lo que ocurre antes de amanecer, y estamos muy contentos con ello».

En el directo de Morat sí que caben los solos de guitarra, y mucho más. La letra de las canciones no se altera, tampoco la velocidad de las mismas, pero «sí el acompañamiento. Incluso canciones como ‘‘Cómo te atreves’’, que llevamos tocando ya años, las interpretamos siempre distinto. La cuestión es no cansarnos y robustecernos. Es la primera vez en la banda que tenemos la oportunidad de estar planeando algo a tan largo plazo, y eso nos emociona mucho», aseguran.

Entrevista a Morat, banda colombiana de Pop / © Alberto R. Roldán /Diario La Razón.
Entrevista a Morat, banda colombiana de Pop / © Alberto R. Roldán /Diario La Razón. Alberto R. RoldánFotógrafos

Al mencionar a la Inteligencia Artificial, los semblantes de los cuatro cambian –los de algunos, tras unas gafas de sol más oscuras que la propia noche, a juego con sus chaquetas de cuero–. «Ese es un buen tema», apuntan, y analizan sus pros y sus contras. Como banda, ya han tenido una experiencia relacionada con esta tecnología, que a la vez les emociona tanto como les preocupa. Tiene que ver con «Tarde», una de las canciones del nuevo EP. Durante el último mes, tocaban esta canción al final de sus conciertos, cuando todavía no estaba en plataformas. «Pasó algo muy bonito: la gente grababa la canción por partes, y empezaron a hablar entre los fans de distintos países para lograr recopilar la versión completa», recuerdan. Una vez lo consiguieron, una persona hizo uso de la IA, «la cantó y la sacó entera. Entonces se empezó a escuchar esta versión. El jueves salió la original, y vimos un comentario dudando de la autenticidad, que les gustaba más cómo sonaba la anterior. A uno tiende a gustarle lo primero que se le muestra, y hay que tener cuidado. A partir de ahora, nos toca ser más cautos mostrando las canciones», reflexionan. Una responsabilidad que toman siendo conscientes de que estos avances «son inevitables, por lo que hay que entenderlos, asesorarse bien y sacarle provecho. A la larga, será más una herramienta para ser competitivos que una suplantación», explican. ¿Nos puede emocionar de la misma manera un solo de guitarra si quien lo interpreta es la IA? Quizá en reflexionar sobre ello resida lo revolucionario.