Cultura

Feria de Otoño

Emilio de Justo: «Tengo la ilusión de atreverme con una gesta, pero Madrid es una plaza que pesa mucho»

El extremeño celebra sus dos Puertas Grandes de Las Ventas, con las que se consagra como la sensación de esta temporada y uno de los toreros de mayor proyección

Emilio de Justo
Emilio de JustoAlberto R. Roldán

Para él ha sido una temporada casi de récord. A pesar de la cornada que sufría a principios de temporada en la Cubierta de Leganés, firmaría nada menos que dos Puertas Grandes de Las Ventas con poco más de dos meses de diferencia. Emilio de Justo sumaba así un par a la que consiguió en 2018. Todo confirma que es torero de Madrid. Sin embargo, últimamente parece que no hay plaza que se le resista. Después de actuar en Jaén, el extremeño habrá sumado un total de 36 festejos y más de 68 orejas (incluyendo dos rabos), convirtiéndose en el tercero del escalafón, muy cerca de Roca Rey y por detrás de Morante. Pero más allá de sus números, es natural calificarlo como la sensación de la temporada, en un año que ha seguido marcado por la pandemia pero que para muchos le ha consagrado como figura del toreo. Hoy El Juli, Miguel Ángel Perera y Daniel Luque intentarán seguir sus pasos con toros de Santiago Domecq.

¿Siente estar en el momento más pleno de su vida?

He conseguido cosas que soñaba de niño. He llegado a la cima. Pero no me gusta decir que es el mejor momento, porque espero que aún vengan más bonitos.

Después de abrir la Puerta Grande de Madrid, ¿cuál sería ahora el más difícil todavía?

La ilusión de hacer un gesto o una gesta en Madrid la tengo, sería un gran orgullo. Tengo muchas cosas en la cabeza, como matar seis toros de una ganadería emblemática o de distintas. Creo que esa idea todos los toreros la hemos tenido alguna vez en nuestra mente. Pero también es verdad que Madrid es una plaza que pesa mucho, hay que tener los pies en la tierra y conservar la paciencia para saber cuál es el momento indicado. No sé si será el año que viene o dentro de tres. Si un día surge la oportunidad y estoy en el momento físico y mental sé que lo haré.

¿Después de una tarde tan intensa como la de esta Feria de Otoño, sintió el vacío del que hablan los grandes toreros?

Cuando te entregas completamente a algo acabas totalmente roto. Eso solo ocurre en las grandes faenas y ante los toros más exigentes. Demasiado desgaste emocional. Pero todo merece la pena por Madrid. La emoción desbordante de la gente te ayuda a recuperarte.

¿Llegó a pensar que el percance de Leganés en mayo podía lastrar su temporada?

Sí. Fueron dos volteretas muy fuertes y salí bastante mermado. De hecho, aún guardo alguna secuela, pero ya me encuentro mucho mejor y no he tenido ningún problema para torear.

¿Le da rabia haber conseguido sus mejores logros en una temporada con tan pocas oportunidades y ferias como esta?

No, afortunadamente para mí en cuanto números ha sido una temporada prácticamente normal, voy a hacer 36 festejos. Pero sobre todo me alegra ver cómo nos acercamos poco a poco hacia la normalidad. Y en cuanto sensaciones, aunque el circuito de las principales ferias haya estado muy limitado, ha sido la más importante de mi vida. Pero por supuesto quiero volver a pisar plazas como Pamplona o Bilbao.

¿Está cansado de qué le pregunten si se considera figura?

No (se ríe). Al contrario, me hace sentir orgulloso. Pero no me gusta colocarme esa etiqueta. Dejo que sea la gente quien me califique como tal. Para mí es una palabra muy fuerte. Yo solo pienso en seguir compartiendo cartel con los mejores y continuar autoexigiéndome.

¿Sintió el adiós de Enrique Ponce como una oportunidad?

No. Para mí él es un espejo en todo, ha sido un torero de época y de los de mayor huella de siempre. Creo que ha acumulado muchos años y eso supone un desgaste incalculable, pero no quiero creer que sea una retirada definitiva. Pero sí que es verdad que empezamos a surgir nuevos toreros que enriquecemos el escalafón.

Con tres Puertas Grandes en Madrid, ¿le ronda por la cabeza asaltar el récord?

En mi cabeza siempre está la intención de superarme. La ambición es necesaria. Aunque no me obsesionan los números, es una realidad que ya estoy concentrado en buscar la próxima Puerta Grande.

¿Le gustaría coincidir en Madrid con Alejandro Talavante la próxima temporada?

Me encantaría. Además, supondría nuestro rencuentro después de que él ejerciese como mi testigo de alternativa. Es uno de los toreros a los que más admiro y además siempre ha tenido el gesto de invitarme a su casa a tentar. Ojalá se pudiera dar.

¿Cómo le ha dejado la exclusión de la Fiesta del nuevo bono cultural joven del Ministerio de Cultura?

Se confirma el complejo de la clase política por la tauromaquia. Pero yo sigo viendo muchísima gente joven en las plazas que estoy pisando, especialmente en Madrid. Solo podemos seguir nuestro camino, no desanimarnos por estas decisiones ajenas y reivindicarnos yendo a la plaza masivamente.