Marco Pérez, con fisura en la cadera, baja indefinida tras una cogida en Alicante

Semana complicada en la enfermería taurina. Tres toreros de proyección —Marco Pérez, Víctor Hernández y Diego San Román— han sufrido percances de diversa gravedad en los últimos días, dejando en el aire sus compromisos inmediatos y encendiendo las alarmas en plena temporada alta.

El caso más preocupante es el de Marco Pérez, que presenta una fisura de cadera, además de una cornada envainada en el muslo izquierdo y una posible afectación del nervio ciático. El torero salmantino fue cogido el domingo en Alicante y no pudo continuar la lidia. Tras ser atendido en la enfermería, fue trasladado al hospital Perpetuo Socorro, donde las primeras pruebas han detectado la gravedad del percance. El torero está siendo trasladado e a Salamanca para continuar con los estudios radiológicos que determinarán el tiempo de baja.

Por su parte, Víctor Hernández permanece ingresado en el hospital de La Princesa, en Madrid, tras la tremenda voltereta sufrida este sábado en la plaza de Torrejón de Ardoz. Las pruebas realizadas han detectado una fractura en el cráneo y un pequeño coágulo en la cabeza. Aunque su entorno asegura que está consciente y estable, el torero no pudo continuar la lidia y su recuperación será vigilada de cerca en los próximos días. La cogida se produjo durante la faena al sexto toro de la tarde, en una serie que terminó de forma abrupta y dramática.

A este parte médico se suma la baja del mexicano Diego San Román, quien toreó con el tendón de Aquiles completamente roto en Istres. El torero terminó la lidia de su segundo toro con la lesión ya presente, aunque sin saber aún su gravedad. De vuelta en México, fue intervenido por el traumatólogo Luis Octavio López Montoya mediante una técnica de mínima invasión. La recuperación se estima en unas ocho semanas, lo que complica seriamente su calendario europeo.

Tres percances distintos, tres lesiones de consideración y un denominador común: el toreo, como siempre, vuelve a recordarnos que la gloria en el ruedo no está exenta del precio físico. La evolución de los tres toreros será seguida de cerca por la afición en las próximas semanas, mientras sus cuadrillas y compromisos esperan con cautela.