Tenis

Andreeva, una revolución "made in Conchita Martínez"

La rusa de 17 años se ha convertido en la revelación de la temporada. Llega como número seis del mundo a Miami después de haber ganado en Dubái e Indian Wells

Mirra Andreeva, con el trofeo de campeona en Indian Wells
Mirra Andreeva, con el trofeo de campeona en Indian WellsJOHN G. MABANGLOAgencia EFE

Mirra Andreeva (29-4-2007, Krasnoyarsk) es la segunda jugadora más joven en el «top 150» de la WTA. También es la que más dinero ha ganado este curso (2.040.000 euros), la que más victorias ha logrado (19 con títulos incluidos en Dubái e Indian Wells) y la primera desde que lo hiciera Serena Williams en 1999 que supera en un mismo torneo a la número uno y dos del mundo. Eso fue en California donde acabó con Swiatek en semifinales y con Sabalenka en la final. Ahora afronta el torneo de Miami desde el número seis del mundo.

Andreeva llevaba tiempo, desde que fue finalista del Open de Australia junior, siendo una de las promesas del circuito. Hace once meses, en el WTA 250 de Rouen, cayó en manos de Conchita Martínez. Y lo que era una jugadora talentosa y polémica –recibió acusaciones de apoyar la invasión de Rusia a Ucrania o se llevó la mayor multa en Wimbledon hace dos años– se transformó. «Es una gran competidora, una gran trabajadora y una chica que escucha mucho», comenta la aragonesa. A los pocos meses de empezar a trabajar juntas, Andreeva fue subcampeona olímpica en dobles, la medallista más joven de la historia después de Jennifer Capriati, y esta temporada ha explotado. Ella apunta a Conchita como una pieza clave: «Es esencial tenerla junto a mí. Desde el primer torneo en el que trabajamos juntas tuvimos una conexión especial, como si nos conociéramos de siempre. Sus consejos son geniales y me ha aportado toda su experiencia, sólo espero que nuestra relación dure muchos años. En lo que siento que más me ha aportado es el aspecto mental. Tiene mucha paciencia, es comprensiva conmigo y eso me da mucha tranquilidad». Sabalenka, su última víctima en Indian Wells y la única jugadora que la ha derrotado este año junto a la checa Sramkova, apunta en la misma dirección: «Me hubiera gustado ser tan inteligente como ella cuando tenía 17 años. Se nota que cuenta con las personas adecuadas a su alrededor, ojalá hubiera dispuesto yo de un equipo como el suyo mucho antes de lo que logré armarlo».

«Ahora, cuando me enfrento a las mejores, siento que puedo ganarles», explicaba Andreeva después de ganar en el desierto de Coachella. Y todo eso reconociendo que no es sencillo trabajar con ella: «Es difícil porque soy muy maniática. Si el primer día que compito en un torneo he comido arroz con pollo, por ejemplo, comeré eso el resto de días, aunque no me apetezca. He de decir que lo que más me gusta es el arroz con un poco de parmesano encima».

Mirra es la menor de dos hermanas. Erika, la mayor, tiene 20 años y es la número 95 del mundo. «No diría que he sacrificado mucho por estar donde estoy», asegura. Y da una explicación a su progresión en los últimos meses: «Mi madre me prometió que si estaba entre las 20 mejores a final de año me comparía un perro. Ahora estoy esperando al perro». Mientras llega o no el perro empresas como Nike, Wilson o Rolex ya han apostado por ella.