Los más de 200 rebrotes de coronavirus registrados en las últimas semanas en España están empezando a pasar factura al turismo. La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, admitió ayer que se están produciendo cancelaciones en algunos destinos turísticos españoles, ante la «inseguridad» que generan los rebrotes. «Espero que las cifras vayan mejorando a medida que controlamos los rebrotes. Ahora mismo, el rebrote sigue generando inseguridad y se están produciendo cancelaciones en algunos destinos», aseguró durante un desayuno informativo de Europa Press.

En este momento, las zonas más afectadas por estos rebrotes son Aragón y Cataluña. El hecho de que ambas comunidades sean limítrofes con Francia ha llevado a que el Ejecutivo francés se haya planteado incluso el cierre de las fronteras. Maroto espera que «no sea necesario» llegar a ese extremo y destacó que los datos de contagios llevan «tres días mejorando». «Las autoridades sanitarias de las comunidades autónomas más afectadas por los rebrotes lo están haciendo bien», aseguró la ministra.

El cierre de la frontera francesa sería un duro golpe no sólo para el turismo de estas dos comunidades sino para el de toda España por la imagen de inseguridad que transmitiría del país en un momento en que algunos de los principales emisores siguen desconfiando de su seguridad sanitaria. Irlanda, décimo país emisor de visitantes, anunció ayer que ha eliminado la cuarentena para 13 países, entre los que no figura España ni Francia ni su vecino Reino Unido, pero sí dos de los grandes competidores para España: Italia y Grecia. La medida puede dejar a los destinos de costa sin medio millón de turistas irlandeses, que son los que vinieron en los meses de julio y agosto del año pasado, según los datos de Frontur, del Instituto Nacional de Estadística (INE). En total, el pasado año visitaron España 2,177 millones de turistas irlandeses, un 6% más de los que llegaron en 2018, que dejaron en e país 2.385 millones de euros.

Turismo interior

Los destinos de sol y playa tan frecuentados por turistas como los irlandeses son, precisamente, los que más están sufriendo esta temporada. Pero no sólo por la falta de turistas extranjeros. Según aseguró Maroto, en las primeras semanas de verano se está observando una «mayor hetereogeneidad» en los destinos elegidos por los españoles para viajar, así como en los productos escogidos. La ministra explicó que el Gobierno está observando que los viajeros asocian el turismo interior y rural con una mayor seguridad e insistió en que el turismo vacacional «es igual de seguro».

El sector turístico -el martes lo hizo la hostelería- viene reclamando desde hace semanas que España siga los pasos de Alemania o Gran Bretaña y reduzca de forma temporal su IVA para reanimar el consumo. Pero el Gobierno se resiste a hacerlo y no parece que vaya a cambiar de opinión. Ayer, Maroto lo volvió adescartar porque supone un esfuerzo presupuestario «importante». «Hay medidas que señala el sector como la bajada del IVA o los planes de estímulo al consumo que suponen un esfuerzo presupuestario importante y por lo tanto tenemos que medir cuál es el impacto y la eficacia de esas medidas», argumentó la ministra.