El acuerdo del Gobierno con la FEMP por el superávit de los ayuntamientos, contra las cuerdas

La rebelión de los ayuntamientos no socialistas es un hecho. Diez alcaldes de ocho partidos diferentes -incluido el socio de la coalición del Gobierno, Unidas Podemos- ultiman un documento de rechazo al acuerdo aprobado por la Federación Española de Municipios (FEMP), y que permitirá a Hacienda usar sus remanentes y superávit, y exigen que el fondo de 5.000 millones se distribuya entre todos, no sólo entre quienes tienen liquidez, punto que fue el que encallaron las negociaciones.

La Femp dio luz verde a la propuesta gracias a la abstención del Grupo Municipalista Izquierda Unida-Podemos-Comuns y del voto de calidad del presidente de la FEMP, el alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero. Éste rompió el empate de 12 votos a favor (PSOE) y 12 en contra (PP, Junts per Catalunya y Ciudadanos). La abstención del socio de la coalición de Gobierno resultó determinante para aceptar la iniciativa gracias al valor doble del voto de Caballero. Los consistorios de la oposición entienden que esta aprobación es una “traición al municipalismo”.

Los participantes en la reunión -los alcaldes de Bilbao (PNV), Granada (Cs), Cádiz (Podemos), Lleida (ERC), Pontevedra (BNG), Reus (PdeCat), Santa Cruz de Tenerife (CC) y Madrid, Murcia y Zaragoza, las tres del PP- advierten de que los partidos a los que representan suman en el Congreso más de 180 diputados por lo que la convalidación del real decreto-ley sería imposible. El Gobierno, al publicar en el BOE ese acuerdo como decreto ley, abrió la puerta sin darse cuenta a que todos los partidos salvo el PSOE puedan votar en contra.

El Partido Popular encabeza esta rebelión en toda regla y su portavoz en la FEMP, Jorge Azcón, artífice de este inédito encuentro de todas las fuerzas políticas, ha advertido de que el Gobierno sólo cuenta con el respaldo del PSOE, por lo que el rechazo es posible. Ante esta situación, denuncia que los plazos de presentación del decreto ley serán tan ajustados en el mes de septiembre que el dinero no llegará este año a ningún municipio. Además, Azcón eleva dos preguntas al aire al Ejecutivo. “Si sale derogado en la votación del Congreso, qué ocurre con los ayuntamientos que ya hayan transferido sus remanentes al Estado para recibir la parte que les corresponde. Y qué pasa con los que no tienen remanentes, que el decreto abandona a su suerte, pero también con las alcaldías que sí tienen ahorros pero consideran injusto e incompleto este texto”. Los ayuntamientos que quieran acceder a este fondo solo disponen hasta el 15 de septiembre para transferir sus ahorros al Estado y entrar así en la distribución del dinero “supuestamente” para este año.

El PP presentará mociones en todos los ayuntamientos para denunciar la “expropiación” del Gobierno a los ahorros municipales y con la que buscará que se unan todos los alcaldes y concejales de España, incluidos los socialistas, que “sabemos que hay muchos que consideran este acuerdo un despropósito”, explicaron a LA RAZÓN fuentes populares. Dentro de las actuaciones, el PP solicitará la reprobación del presidente de la FEMP, Abel Caballero, por “traicionar al municipalismo” al no defender los “intereses de todas las entidades locales” y permitir que se rompa un “consenso histórico” en la institución.

El decreto ley debe convalidarse en los 30 días posteriores a su publicación en el BOE por lo que deberá presentarse como muy tarde, a principios de septiembre.