Cómo proteger tu casa del frío sin gastar más de 50 euros en la ferretería

La llegada de una masa de aire de frío polar a España así como el desorbitado aumento de los precios en las facturas del gas y de la electricidad hacen que cada vez sean más las personas que busquen alternativas para calentar sus hogares con un ahorro de costes.

Una de las alternativas más eficaces es el aislamiento correcto del hogar, ya que no solo reduce el gasto de energía con la calefacción, sino que también contribuye a reducir las emisiones de gases CO2 con efecto invernadero, lo cual supone un beneficio importante para el medio ambiente.

Sin embargo, las deficiencias de aislamiento en muchas de las viviendas hace que se llegue a despilfarrar más del 50% de la energía consumida, por lo que el usuario acaba disfrutando solo de la mitad de lo que haya pagado y crea una mayor contaminación.

Pero, ¿cómo podemos retener el calor dentro de nuestro hogar? Son muchos los elementos que más allá del carácter decorativo que tienen pueden ser una buena inversión económica y ecológica para muchos hogares como el uso de cortinas y alfombras, burletes adhesivos, perfiles bajeros para puertas, tubos y aplicadores de silicona para renovar el sellado de las ventanas.

En el caso de las cortinas y alfombras, uno de los métodos más eficaces es recurrir al empleo de las más tradiciones, ya que independientemente de su función decorativa, esta forma de aislamiento tiene efectos notables ya que puede retener el calor en un 20%. Asimismo, además de esta función para retener el calor, los usuarios perderían el contacto con el suelo o las paredes exteriores que emanan el frío polar de esta temporada.

Las ventanas son otro de los puntos claves del hogar en el que se produce uno de los mayores despilfarros de energía, ya que tras el paso de los años, las juntas pierden efectividad al no tener la misma capacidad de sellado que tenían al principio. Es por ello que los usuarios para poner fin a esta pérdida de dinero y energía, es necesario que apliquen silicona y repasen de manera manual todas las juntas de las ventanas del hogar que tengan intención de aislar.

No obstante, no sólo es la falta de sellado de las ventanas lo que puede enfriar nuestros hogares, sino también los burletes autoadhesivos del interior de los marcos y las hojas de las ventanas, así como las láminas aislantes de los bajos de las puertas. Estos son elementos que como los anteriores requieren de una sustitución tras el paso del tiempo, ya que dejan de ser efectivos, generando una pérdida de aire caliente del interior de la vivienda.

Asimismo, las juntas de las cajas en las que se encuentran enrolladas las persianas puede ser otro punto importante en el que se encuentre una deficiencia, por ello, es necesario que se aísle el interior de estas cajas, así como usar cinta aislante en las juntas.

La forma de comprobar si existe una fuga de calor y una entrada de frío en algún punto concreto de nuestro hogar se puede realizar acercando un mechero o una vela, si esta llama se mueve estamos ante una entrada leve de aire, pero si se apaga esto puede suponer un despilfarro grande de energía. Por lo tanto ante esta situación es necesario llevar a cabo los pasos previamente señalados como revisar las juntas con silicona o instalar burletes aislantes.

Para un piso de no más de 100 metros cuadrados, el llevar a cabo todas estas inversiones supondrá un coste máximo de 50 euros de inversión. Es por ello que esto supone una opción muy tentadora que puede aumentar el ahorro en más de un 40% con respecto al precio actual tanto del gas como de la energía.