Barómetro

El CIS al servicio del PSOE

Desde que Sánchez nombró a Tezanos para instrumentalizar los recursos de esta entidad en su propio beneficio, las encuestas electorales del centro no dejan de acumular fracaso tras fracaso

El coste presupuestario del Centro de Investigaciones Sociológicas asciende a 11 millones de euros anuales. No se trataría de una suma desproporcionada si estuviéramos ante un organismo independiente que proporcionara información de calidad al Ejecutivo para que éste pudiese mejorar la orientación de las políticas públicas. Sin embargo, al menos por lo que respecta a los sondeos electorales, el CIS se ha convertido en una mera herramienta del Estado al servicio del PSOE: ese mismo partido al que está afiliado desde 1973 su presidente, José Félix Tezanos.

Desde que Sánchez nombró a Tezanos para instrumentalizar los recursos de esta entidad en su propio beneficio, las encuestas electorales del centro no dejan de acumular fracaso tras fracaso. Castilla y León no ha sido una excepción. El CIS ha errado en todos los resultados de los grandes partidos aun con habiéndose cubierto con amplios márgenes de error: al PSOE le atribuyó entre 29 y 34 diputados, cuando finalmente han sido 28; al PP, entre 24 y 30, cuando finalmente han sido 31; a Vox entre 8 y 9, pese a que finalmente han sido 13; a Ciudadanos entre 2 y 5, cuando finalmente ha sido 1; y a Unidas Podemos entre 2-4, aunque al final se ha quedado también en 1. Se dirá que acaso la intención de voto ha fluctuado desde esta encuesta y que Tezanos no puede «adivinar» esas fluctuaciones. De hecho, otras encuestadoras privadas también dieron inicialmente resultados mucho más abultados al PP que probablemente fueron desinflándose con el paso de los días.

Pero, aun cuando quisiéramos conceder alguna relevancia a este argumento, lo cierto es que las principales fluctuaciones se han dado dentro de los bloques de izquierdas y de derechas (sobre todo, dentro del bloque de la derecha), y ahí el CIS de Tezanos ha fallado igualmente: al bloque de izquierdas (PSOE y Podemos) le otorgó entre un mínimo de 31 diputados y un máximo de 38, han sido 29; al bloque de derechas (PP, Vox y Ciudadanos) le atribuyó entre un mínimo de 34 diputados y un máximo de 44, han sido 45. Ni a propósito era posible fallar tanto… o tal vez a propósito sí. A la postre, el propósito de la encuesta del CIS no era otro que el de movilizar al electorado socialista («podemos ganar las elecciones, no está todo perdido») y no anticipar el resultado de las urnas. 11 millones de euros al servicio de la propaganda sanchista.