Economía

Calviño, de “gira” por Estados Unidos para “vender” España a inversores y organismos

La vicepresidenta económica, que estuvo este jueves en el FMI, resume su visita con dos palabras: preocupación y confianza

Nadia Calviño atendía a los medios españoles este jueves desde la sede del Fondo Monetario Internacional durante un encuentro organizado en paralelo a las reuniones anuales de los organismos internacionales en Washington. Reuniones que, según la ministra española, “se producen en un momento particularmente complejo y delicado para la Economía mundial”. También en una situación clave de consenso bajo el contexto de “muy elevada incertidumbre”, en el que se percibe “una gran preocupación”.

Calviño describía el ambiente de la capital estadounidense esta semana como consecuencia del “tono endurecido con Rusia porque el impacto económico de la guerra se está haciendo cada vez más patente y, además, está dañando especialmente a las economías emergentes, a las más vulnerables”. En este sentido, estos días “el mensaje que más se repite es el de la necesidad de poner fin cuanto antes a esta guerra de Putin, de Rusia contra Ucrania, y también se llama a la necesidad de reforzar el marco multilateral y coordinar nuestras políticas económicas”.

Al impacto de la guerra, se une “la elevación sincronizada de los tipos de interés a nivel mundial, lo cual aumenta también la vulnerabilidad desde el punto de vista de la estabilidad económica y financiera”. Bajo ese contexto, la ministra de Economía cree que “el multilateralismo es la única respuesta para poder hacer frente a los retos actuales que tienen un carácter global”. Para ello, asegura, desde el Gobierno se han puesto en marcha en los últimos meses distintos instrumentos de apoyo financiero que muestran la fortaleza de esta red de seguridad internacional a hora de apoyar la economía y contribuir a la estabilización financiera.

“España ha impulsado varias iniciativas, que serán probablemente de los logros más destacados de las reuniones de estas asambleas. Por ejemplo, la puesta en marcha del fondo para la resiliencia y la sostenibilidad que se creó en las asambleas de primavera y que se destina a la financiación de los países de renta baja y media más vulnerables para reforzar su capacidad para abordar las inversiones necesarias para la transición ecológica. Y también la preparación con respecto a las pandemias”. España ha sido el primer país en formalizar una contribución a este fondo. Un papel pionero que fue señalado por la directora ejecutiva ayer mismo”, añadió Calviño.

Varapalo en las previsiones

Con respecto a las previsiones de crecimiento para 2023, que el FMI rebajó del 2,1% al 1,2% hace unos días, la ministra explicó que “todos los organismos coinciden en que la economía española va a seguir creciendo en 2023 y que va a crecer muy por encima de los países de nuestro entorno y de la media de la Unión Europea. Y ése es un mensaje de confianza en la economía española y en la política económica del Gobierno, que es unívoco y unánime en todos nuestros intercambios estos días, con nuestros interlocutores, ya sea con otros países, con los organismos internacionales o los intercambios que hemos tenido con inversores del mercado financiero”.

Tanto en Nueva York, donde dio comienzo su viaje a Estados Unidos, como en Washington, la agenda de Nadia Calviño incluyó distintos encuentros con fondos de inversión, medios de comunicación, funcionarios y representantes de organizaciones internacionales como el FMI y el Banco Mundial. “Todos ellos manifiestan su confianza en la economía española y en la política económica del Gobierno de España”, enfatizó.

Su visita a la capital de Estados Unidos, en respuesta a LA RAZÓN, “se resume en “dos palabras que resumen el ambiente y los intercambios que estamos teniendo: por una parte “preocupación” con respecto a la economía internacional y, por otra, “confianza” en la economía española y la política económica de nuestro Gobierno”.

La caída alemana

Con respecto a la economía alemana, Calviño cree que “es evidente que las perspectivas negativas no son una buena noticia para España. La economía europea está muy integrada y Alemania es uno de nuestros principales mercados. “Cuando Alemania estornuda, Europa se costipa”, es una buena metáfora de la situación actual. Estas reuniones se inician en un clima de preocupación que reconoce la enorme complejidad de la situación internacional”.

Aún así, asegura la ministra española, “incluso en este contexto tan complejo todos los organismos prevén que la economía española siga creciendo durante el año próximo y vemos algunos indicadores de cambio estructural que hacen que la economía española esté en una situación particularmente fuerte desde el punto de vista histórico para afrontar los retos que tengamos por delante en las próximas semanas y meses”.

“De hecho, en el plan presupuestario que vamos a enviar a Bruselas en el transcurso de la semana vamos a especificar y detallar el impacto de alguno de estos cambios estructurales y, en concreto, el impacto de la mejora del mercado de trabajo el afloramiento de la economía sumergida, que refuerzan el funcionamiento de nuestros mercados, la capacidad de la economía española de afrontar una desaceleración económica y que refuerzan también nuestras cuentas públicas”.