Banca
El BCE sigue el guion previsto y mantiene los tipos de interés en el 4,25% tras el primer alivio de junio
En la decisión de este jueves no ha podido votar ningún representante del Banco de España, ya que Gobierno de coalición y el Partido Popular aún no han acordado un sustituto para Pablo Hernández de Cos
El Banco Central Europeo (BCE) no ha dado sorpresas y ha mantenido los tipos de interés en el 4,25%, nivel en el que se encuentran desde junio, cuando la entidad monetaria decidió rebajar el precio del dinero en 0,25 puntos, el primer recorte de los tipos de interés en ocho años. En la decisión de este jueves no ha podido votar ningún representante del Banco de España, ya que Gobierno de coalición y el Partido Popular aún no han acordado un sustituto para Pablo Hernández de Cos, ex gobernador del Banco de España, que acabó su mandato el pasado 10 de junio, apenas cuatro días después de la reunión previa del BCE.
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, ha evitado fijar un camino predeterminado para las siguientes reuniones y considera que recibirá "mucha más información hasta septiembre", cuando la entidad volverá a reunirse. El Banco Central Europeo ha dejado claro en numerosas ocasiones que actuará con cautela y no bajará los tipos a corto plazo e incluso ha retrasado hasta el año 2026, doce meses más tarde de lo previsto inicialmente, el cumplimiento del objetivo del 2% de inflación. Si en mayo, las previsiones del BCE eran del 2,3%, 2% y 1,9% para 2024, 2025 y 2026, ahora estas cifras se han incrementado hasta el 2,5%, 2,2% y 1,9%, respectivamente.
"Las presiones sobre los precios internos siguen siendo elevadas, la inflación de los servicios es elevada y es probable que la inflación general se mantenga por encima de la meta hasta bien entrado el próximo año", ha argumentado el BCE, que se ha mostrado "decidido a garantizar que la inflación regrese oportunamente a su objetivo a medio plazo del 2%" manteniendo la política monetaria lo suficientemente restrictiva "durante el tiempo que sea necesario".
"El Consejo de Gobierno seguirá aplicando un enfoque dependiente de los datos y reunión por reunión para determinar el nivel apropiado y la duración de la restricción", ha señalado la entidad monetaria en una nota. En particular, sus decisiones sobre tipos de interés se basarán en su evaluación de las perspectivas de inflación a la luz de los datos económicos y financieros entrantes, la dinámica de la inflación subyacente y la fortaleza de la transmisión de la política monetaria, ha detallado.
Otros datos tampoco abonan el camino a una estrategia agresiva de recorte de tipos de interés. La inflación de la zona euro se situó en junio en el 2,5%, una décima menos que en mayo. Sin embargo, la inflación subyacente -que excluye la energía y los alimentos frescos por su volatilidad- se mantuvo estable en el 2,9% Mientras, los salarios también registraron un alza del 4,69% en el primer trimestre y el PIB superó la recesión técnica, ya que creció un 0,3% en los primeros tres meses del año.
"A la vista de los datos actuales, no parece justificada una bajada de tipos en julio. Deberíamos actuar con cautela", declaró a finales de mayo Isabel Schnabel, miembro del Comité Ejecutivo del BCE, en una entrevista concedida al periódico japonés Nikkei. Por su parte, Christine Lagarde advirtió durante la apertura del foro de política monetaria de Sintra, de que "dada la magnitud del shock de inflación, todavía no está garantizado un aterrizaje suave", que implica una desaceleración de la economía suficiente para reducir la inflación, pero sin provocar una recesión. De esta manera, la institución monetaria no ha querido comprometerse a que las rebajas de tipos vayan a ser sucesivas como sí lo fueron las 10 subidas acometidas desde julio de 2022 para apaciguar la persistente inflación y ha preferido ir anunciando las decisiones reunión a reunión.
Además, una nueva bajada de tipos habría distanciado aún más las posturas del BCE y la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Mientras que la entidad monetaria europea bajó los tipos en junio, la Fed los mantuvo en el rango de 5,25-5,50%, destacando que no prevé reducciones hasta que haya una mayor confianza en que la inflación se dirige de manera sostenible hacia el 2%. No obstante, uno de los consejeros de la Reserva Federal, Christopher Waller, ha anunciado esta misma semana que el primer recorte de tipos está próximo tras constatar el enfriamiento de la economía de EE UU.
Desde el inicio de la espiral inflacionista, la entidad monetaria ha llevado a cabo en los últimos años diez subidas consecutivas de tipos de interés que comenzaron en julio de 2022. El Consejo de Gobierno de la entidad monetaria decidió hacer un alto en el camino en octubre de 2023 y mantener el precio del dinero el en el 4,5% hasta junio, momento en el que lo rebajó al 4,25% para mantenerlo en el mismo nivel tras la reunión de este jueves. En cuanto a la facilidad marginal del crédito y la facilidad del depósito, los tipos se mantienen también en el 4,5% y el 3,75% respectivamente.
Los hipotecados a tipo variable han sido los más beneficiados por la bajada de tipos y posterior congelación de los tipos, ya que el euríbor el indicador al que se referencian la mayoría de hipotecas variables en España, cayó ayer al 3,503%, su nivel más bajo desde marzo de 2023. No obstante, la congelación anunciada hoy podría detener este alivio.
✕
Accede a tu cuenta para comentar