IPC

La compra sube un 13% en un año y está un 24% más cara que en 2021

La inflación no da tregua a los consumidores y el IPC general sube al 4,1% en abril, frente al 3,3% de marzo

IPC abril 2023
IPC abril 2023T. GallardoLa Razón

La inflación de los alimentos continúa en dos dígitos y mantiene la economía de las familias contra las cuerdas, máxime cuando el IPC) de abril se elevó un 0,6% en relación al mes anterior y ocho décimas en su tasa interanual, hasta el 4,1%. En este caso, la mayor incidencia tuvo que ver con el encarecimiento de los carburantes y una disminución menos intensa de los precios de la electricidad. El coste de la cesta de la compra siguió creciendo aunque a menor ritmo, para sumar un 12,9% en tasa interanual, 3,5 puntos por debajo de la tasa de marzo. No obstante, los precios de los principales productos básicos –carne, pan, cereales, aceites, leche, queso, huevos, legumbres y hortalizas– habían subido ya con mucha fuerza (+10,1%) en abril de 2022, por lo que acumulan un alza ya de más del 24% en dos años.

Según los datos del INE, prácticamente todos los alimentos siguen estando más caros que hace un año, aunque la mayoría ha mantenido su precio más o menos estable respecto al mes de marzo, con una subida general de los alimentos del 0,3%. En tasa interanual, el aceite de oliva ha subido un 22,2% –diez puntos menos que el mes anterior; el azúcar (49,6%); la mantequilla (31,2%); la leche (27,7%); los cereales (18,2%); los productos lácteos (17,6%); las patatas (16,5%); la carne de cerdo (16,1%); los huevos (15,8%). Las menores subidas las acumulan los frutos secos (6%); el marisco (5,6%); y la fruta fresca (2,9%). Otra cosa es en términos intermensuales, porque han seguido subiendo las patatas (2,8 %), la carne de cerdo (2,7%), los huevos (2,2 %) o el pescado (2,1%), pero han tenido una línea descendente la fruta fresca (-4,2%) y de las legumbres y hortalizas frescas (-2,6%); la mantequilla (-0,9%) y el yogur y el azúcar (-0,2%).

En lo que va de año, la mayoría de los alimentos básicos en la cesta de la compra han encadenado subidas, salvo la fruta, que arrancó en enero con una caída del 3,5% y registró en abril otro descenso del 3,3%; las legumbres y hortalizas, que también empezaron el año con una bajada del 1%, pero que ya se ha quedado en nada, al volver a una senda alcista; pescado y marisco, que dio un respiro con una bajada del 1,7% –aunque insuficiente para contener las subidas de los otros tres meses–; y el aceite, que registró en abril su primer decrecimiento del año (-1,8%).

Desde que el Gobierno aprobó la rebaja del IVA sobre algunos alimentos, solo ha incidido realmente entre enero y abril en el precio de las frutas. Todo lo contrario que en productos tan importantes como las legumbres y hortalizas (+9,7%), el azúcar, confitura, miel y chocolate (+8,7%) y el agua mineral, refrescos y zumos de frutas (+7,5%), que experimentaron fuertes subidas. Por su parte, el precio de la carne ha subido un 3,3%; el del pan y los cereales, un 3,2%; y el del pescado y marisco, un 2,4%. Aunque el último paquete anticrisis –que incluyó la bajada del IVA en algunos alimentos– ha permitido reducir en parte el incremento de los alimentos, la tasa mensual todavía no ha registrado ningún descenso, por lo que su impacto no ha permitido registrar bajada alguna.

Aunque el último paquete anticrisis –que incluyó la bajada del IVA en algunos alimentos– ha permitido reducir en parte el incremento del precio de los alimentos, la tasa mensual todavía no ha registrado ningún descenso, por lo que su impacto no ha permitido registrar bajada alguna. Especial atención tiene el precio del alquiler de vivienda, que tuvo una subida mensual de un 2,1%, en máximos desde la crisis de 2008. De esta manera, continúa al alza la tendencia de crecimiento de este indicador. El mes de julio de 2016 fue el último con un descenso del coste del alquiler.

En cuanto al IPC general, este creció seis décimas en abril, después de que en marzo se impulsara otras cuatro, consolidando la tendencia alcista, impulsada por el incremento de precio del vestido y del calzado, de los servicios de alojamiento y restauración, de los carburantes y de los paquetes turísticos. El Ministerio de Asuntos Económicos justificó su repunte por el «efecto base» al compararlo con el mes en el que estalló la guerra de Ucrania.