Entrevista

«No descarto presentarme a presidir Cepyme para defender a tanto empresario maltratado»

Sin freno en su defensa de las pymes, Fernando Santiago (presidente del Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos de España) carga contra unos agentes sociales sin independencia y los políticos «despiadados que insultan a los empresarios que pagan impuestos»

Entrevista con Fernando Santiago Ollero, presidente del Ilustre Colegio Oficial de Gestores Administrativos de Madrid
Entrevista con Fernando Santiago Ollero, presidente del Ilustre Colegio Oficial de Gestores Administrativos de MadridAlberto R. RoldánLa Razón

Más de 8 años avalan el trabajo incansable de Fernando Santiago como presidente del Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos, un puesto que no le cansa, sino que le «motiva más cada día». Mordaz, verborreico, clarividente, sincero a más no poder y, por encima de todo, honesto. Carga sin pelos en la lengua contra las »aberraciones» del Gobierno y critica a los agentes sociales por igual, a los sindicatos por defender a quien les paga y a las patronales por no defender «de verdad» a los empresarios. Santiago dixit.

¿Qué ha cambiado en ocho años al frente de los gestores administrativos?

Ha cambiado todo. Con la ley de acceso electrónico de los ciudadanos a los servicios públicos, de 2007, los gestores eran una profesión a desaparecer, por lo que tuvimos que afrontar un reciclaje que nos ha llevado a ser referencia e imprescindibles.

¿Qué lleva a un empresario a representar a 6.000 gestores?

Defender al pequeño empresario y al autónomo es muy gratificante, aunque me cueste trabajar más horas en la organización que en mi propio trabajo.

Siempre dice que los gestores Administrativos mantienen engrasada la Administración Pública, pero que el Gobierno desaprovecha su profesionalidad y su experiencia.

Estamos totalmente desaprovechados e ignorados. Somos la punta de lanza de la empresa ante la Administración, que aún no entiende que su mejor cliente somos los gestores. Creo que deben dejar de lado el adagio latino de que los ciudadanos son malos por naturaleza y se tienen que justificar. Los ciudadanos españoles son de los más cumplidores del mundo y los gestores no somos los que hacen la trampa para beneficiarse, al contrario. La Administración no cree en los ciudadanos, solo en sí misma y en su propio beneficio.

¿Se puede mejorar la gestión pública?

Muchas veces, la Administración y el Gobierno están desconectados de la realidad. Nosotros no trabajamos en las grandes esferas, ni en los grandes despachos, pero sabemos cuándo una ley, solo con verla y olerla, no va a funcionar, como pasó con el decreto de los fondos Next Generation, porque los enfocan a las grandes compañías no para el que debería ser su principal destinatario, las pymes y los autónomos, que son el 99% del tejido productivo.

¿La pandemia lo ha cambiado todo?

Ha demostrado que, a pesar de lo que digan, no estábamos tan digitalizados como creíamos. Y se ha visto que la Administración pública está colapsada, saturada y mal gestionada. De ahí los graves problemas que acumula.

¿Por ejemplo?

Porque organismos clave como el SEPE, por ejemplo, dejaron a un millón personas sin cobrar al colapsar; la Dirección General de Tráfico o la Seguridad Social tuvieron infinidad de problemas y solo se salvaron porque los gestores gestionamos todo.

Entonces, ¿fueron su tabla de salvación?

Nosotros hemos estado en todas las crisis, hemos sido el nexo de enlace entre la empresa y la Administración, que no se ha paralizado porque el 98% de las presentaciones telemáticas las hicimos nosotros. En la pandemia seguimos trabajando porque alguien tenía que tramitar los despidos, las nóminas, los ERTE, los informes financieros para los bancos, los impuestos... El Gobierno podía prescindir de muchas cosas, pero no de recaudar.

¿Las pymes aún no se han recuperado del golpe?

Mientras los gobiernos no tomen conciencia de que tiene que haber un estatus personal para el autónomo y la pequeña empresa, que es la mayoría, vamos muy mal. Se sigue legislando para las grandes empresas. Pese a ello, autónomos y pequeñas empresas salvarán como siempre la economía con su trabajo y con su esfuerzo porque les va en ello el futuro de sus negocios y sus familias, y no gracias al Gobierno. De donde no saldrá la solución es de la banca y de las multinacionales.

¿Cree que el Gobierno no está tomando las decisiones correctas?

Los ICO, las ayudas, las subvenciones... no han llegado donde tenían que llegar. Como siempre, la mayoría se han entregado a las grandes corporaciones. Y luego, tenemos unos comités de expertos con elefantes políticos que no están en la calle. A los que deberían de preguntar para solucionar los problemas es a los funcionarios de ventanilla, que saben mucho más que el 98% de los expertos y directores generales, y son los que podrían solucionar todos los problemas de la Administración, pero no cuentan con ellos.

Ley de vivienda, intervención del alquiler, tope a los alimentos, etc.

¿Qué le parece este intervencionismo?

El afán intervencionista del Gobierno va a más. Decir que tener cinco inmuebles es ser una gran tenedor es una aberración. Hay millones de personas que se han dejado la piel para poder comprar un inmueble, le han cosido a impuestos por ello, y se mueren y les hacen pagar otra vez. No tiene fin. La mayoría de los que alquilan un piso no es para especular, es por tener una pequeña renta que les permita vivir mejor. Pero solo piensan en sus votos.

¿Cree que el Gobierno está haciendo una campaña de desprestigio contra los empresarios españoles?

Absolutamente. Para algunos miembros del Gobierno los empresarios son unos capitalistas despiadados. Entonces, cuando ellos dejan la política y van a ocupar puestos directivos en empresas se convertirán entonces en capitalistas despiadados, ¿no? No se puede insultar a la gente que paga impuestos. Pero no solo en este Gobierno, porque todos han tenido siempre una absoluta falta de consideración y de empatía. Lo que deberían hacer es hacerse empresarios y ver lo que cuesta y lo que se sufre para sacar adelante a tu empresa y tus trabajadores. No dirían tantas tonterías.

Entonces, ¿considera que el Gobierno, y la Administración en general, tienen falta empatía con ciudadanos, autónomos y pymes a las que, por ejemplo, no se actualiza los contratos públicos?

La Administración está batiendo todos los récords de recaudación gracias a no adaptar las bases de recaudación a la inflación, sin deflactar ni adaptar absolutamente nada. Eso sí es capitalismo despiadado, pero jugarte tu dinero en una empresa, no. Por favor... Los despiadados son los políticos, no los empresarios.

Explica a menudo que conoce el funcionamiento, las necesidades y las virtudes de los pequeños y medianos negocios. ¿Qué haría para mejorar la situación de las pymes?

Hacer un estatuto en condiciones para el autónomo y la micropyme. Más financiación, menos burocracia, menos controles, y menos presión de los bancos, que tienen un arma arrojadiza porque muchas veces arruinan al empresario que podría salir a delante con ayuda pero no se tiene empatía con él. Pediría una legislación menos a favor de los grandes y más a favor de los pequeños, que son los que verdaderamente sostienen la economía española. Y una legislación coherente sobre pagos, porque muchas veces cobrar a 90 días ahoga a los pequeños.

¿Y cómo se soluciona eso?

Lo primero, obligando a pagar máximo a 30 días, empezando por la Administración. ¿Por qué se permite pagar hasta a 180 días? Es una aberración. Se pueden rebajar perfectamente las fechas de pago, pero no se quiere hacer.

¿Piensa que los agentes sociales no se preocupan lo suficiente de los pequeños y medianos negocios?

Le recuerdo que los sindicatos son los primeros que despiden en épocas de crisis, o cuando las cosas van bien lo único que reclaman son más subvenciones y más dinero para gestionar. Pero trabajar, poco.

¿Y la CEOE?

También tiene lo suyo. Por ejemplo, el presidente de la CEOE no debería cobrar de la organización lo que cobra, porque pierde toda la independencia, como la que tengo yo con los gestores, porque yo me mantengo con mi trabajo, pero el presidente de la CEOE, que gana 400.000 euros y vive de eso, no se va a ir nunca y se agarrará ahí como a un clavo ardiendo. Pero no me refiero solo a Antonio Garamendi, me refiero a todos los presidentes que cobran, que no son pocos. Porque no lo dicen, muchos lo ocultan en sus cuentas.

¿Usted no cobraría si presidiera CEOE o Cepyme?

Por supuesto que no, yo vivo de mi trabajo. Es un puesto en el que se está para ayudar a los empresarios, no para beneficiarse económicamente.

¿Si le propusieran dar un salto hacia adelante y liderar una alternativa en la organización patronal, lo haría?

Yo en este momento estoy dedicado a los gestores administrativos. No sé lo que voy a hacer mañana, pero siempre estoy dispuesto a todo, pero con condiciones.

¿Qué condiciones?

Que las cosas se hagan bien y que no haya consignas. Para eso ya están los partidos políticos. Las organizaciones empresariales hay que dirigirlas defendiendo a los tuyos, sacrificando los intereses particulares a los colectivos.

¿Estudia entonces postularse a la presidencia de Cepyme?

Aún quedan tres años para las elecciones y ahora estoy centrado en los gestores administrativos.

¿Y dentro de tres años?

Cuando llegue el momento, hablamos, pero yo nunca descarto nada si es para defender a tanto empresario maltratado.