Japón

La economía de Japón se desinfla por el fuerte contagio de China

El PIB cae un 1,6% entre abril y junio tras medio año de crecimiento

La economía japonesa se ha contraído un 1,6 por ciento
La economía japonesa se ha contraído un 1,6 por cientolarazon

La economía japonesa, la tercera del planeta, vuelve a mostrar síntomas importantes de debilidad. Después de seis meses de crecimiento continuado que pusieron fin a una situación de recesión técnica entre abril y septiembre del pasado año, el PIB ha vuelto a retroceder. Y, además, de forma importante. Lo ha hecho un 1,6% en el segundo trimestre del año en tasa anual, muy por encima de lo que pronosticaban los analistas, y las razones del descalabro son, básicamente, dos: la preocupante debilidad del consumo interno y el contagio del frenazo que ha experimentado la economía del otro gigante asiático, China. Una vez más, la dependencia de la industria nipona con respecto a su vecino ha lastrado el crecimiento del país.

Los datos ofrecidos por el ministro japonés de Política Económica y Fiscal, Akira Amari, son elocuentes al respecto. El consumo, que protagoniza casi el 60% del PIB del país del sol naciente se contrajo un 0,8% con respecto al periodo que transcurre entre enero y marzo. Los «factures estacionales» a los que atribuyó la caída, informa Efe, terminaron pesando más que la subida salarial promovida por el Gobierno de Shizo Abe. Por su parte, las exportaciones se desplomaron un 4,4%, y el motivo principal se encuentra en el parón de la China, principal socio comercial de Japón. El efecto contagio provocado por la debilidad del gigante asiático empieza a extendese.

La bolsa resiste

¿Tuvo efecto este mal dato en la bolsa nipona? Contra todo pronóstico, no. Al final, el mercado cerró con ganancias. De hecho, la debilidad económica de este trimestre ha llevado a numerosos inversores a estimar que el Ejecutivo dará nuevos pasos con medidas adicionales de flexibilización. Esta vuelta de tuerca a la llamada «Abenomics», como se denomina a la política económica seguida por el Gobierno, completaría las subidas salariales o las inversiones de capital ya promovidas.

Otros analistas japoneses creen, sin embargo, que el país podría seguir los pasos ya dados por China y acuerdar una devaluación de la moneda, el yen, lo que encarecería las importaciones y lastraría el ya debilitado consumo doméstico por el empobrecimiento generalizado de la población del país, informa Efe. El fin sería reactivar de nuevo la exportación de productos.

«La poco previsible aceleración de la economía china» durante los próximos meses supone «un factor de riesgo» para el PIB nipón, manifestó el economista Kenji Tanaka, del Banco nipón de Desarrollo, en declaraciones a la agencia local Kyodo.