
Economistas
José Elías, empresario, sobre la jubilación: “Es inasumible para muchos”
La jubilación soñada es para miles de empresarios españoles una amarga paradoja: el prohibitivo coste de cerrar el negocio de toda una vida les obliga a seguir trabajando, atrapados en su propio legado

Llegar a la edad de jubilación tras una vida entera de esfuerzo al frente de un negocio propio debería ser sinónimo de descanso y tranquilidad. Sin embargo, para miles de pequeños empresarios en España, este momento se convierte en una auténtica pesadilla económica y burocrática. El motivo no es otro que los elevados costes que implica echar el cierre, una barrera que les impide retirarse dignamente y que amenaza con devorar los ahorros acumulados durante décadas de trabajo en un auténtico laberinto financiero.
A required part of this site couldn’t load. This may be due to a browser
extension, network issues, or browser settings. Please check your
connection, disable any ad blockers, or try using a different browser.
En concreto, el principal escollo se encuentra en el complejo proceso de liquidación de una Sociedad Limitada. La ley obliga a indemnizar a toda la plantilla por el cese de actividad, una carga que en la mayoría de los casos resulta demoledora para las finanzas de una pequeña empresa. El desembolso por la indemnización de la plantilla es tan grande que puede absorber los ahorros de toda una vida. Según palabras del empresario José Elías, "es inasumible para muchos", una sentencia que resume la cruda realidad que obliga a numerosos autónomos a posponer su retiro de forma indefinida.
De esta forma, la situación ha generado una paradoja dramática: empresarios que, con más de setenta años, se ven forzados a continuar al pie del cañón porque están, en palabras del propio Elías, «atrapados» por sus propias empresas. Ante este panorama desolador, las salidas son escasas y complejas. La primera opción es encontrar un comprador solvente; la segunda, ceder el testigo a un familiar; y la última, la más temida, es afrontar el desorbitado coste del cierre definitivo, renunciando a un merecido descanso.
Un relevo generacional como única salida
Además, la magnitud de este problema es considerable si se tiene en cuenta que más del 98 % del tejido empresarial español está compuesto por pymes. Un porcentaje muy elevado de estas compañías está dirigido por emprendedores que superan los 55 años y que, con demasiada frecuencia, carecen de un plan de sucesión claro. Por este motivo, la compraventa de pequeñas y medianas empresas se postula como una solución fundamental, no solo para compensar el esfuerzo del fundador, sino para asegurar la continuidad de los negocios que son perfectamente viables.
En consecuencia, la ausencia de mecanismos que faciliten este relevo generacional tiene efectos directos y muy perjudiciales para la economía nacional. La falta de una planificación anticipada, que los expertos recomiendan iniciar años antes del retiro, aboca al cierre a empresas solventes, con la consiguiente destrucción de puestos de trabajo y la pérdida de un valioso capital empresarial y de conocimiento acumulado para el conjunto del país.
✕
Accede a tu cuenta para comentar