Temor

El miedo a perder el piso que tanto les ha costado encontrar lleva a los inquilinos a aceptar sin intentar negociar el precio del alquiler

Más del 70% asume la renta que le impone el casero sin siquiera plantear alguna rebaja

Economía.- Pisos.com prevé una "leve" subida del 2% del precio de la vivienda en venta y del 1% del alquiler en 2024
Anuncio de vivienda en alquilerEuropa Press

Encontrar una vivienda en alquiler se ha convertido en un reto, cuando no en algo imposible, para muchos jóvenes o familias con pocos recursos en España. Por eso, cuando encuentran una que pueden pagar, prefieren no arriesgarse a perderla pidiendo una rebaja de precio a su casero aunque puedan considerar que el coste es algo excesivo. Según un análisis del portal inmobiliario Fotocasa, el 71% de los inquilinos aceptan sin rechistar la renta que le piden.

“La negociación es una de las vías más beneficiosas para que ambas partes del acuerdo se sientan cómodas. Sin embargo, cada año, el volumen de inquilinos que se atreven a negociar disminuye", asegura María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa. "Intentar una rebaja en el precio es una idea descabellada para la gran mayoría, en un mercado donde encontrar una vivienda que se ajuste a las necesidades ya es un gran logro. En un contexto de alta demanda y menos oferta que nunca, el propietario tiene cierta independencia para fijar el precio, ya que, si el primer candidato no está dispuesto, el siguiente en la fila probablemente aceptará el pago sin rechistar", añade.

En el mercado del alquiler, sólo el 29% de inquilinos que han alquilado una vivienda para residir en ella han negociado su precio en lo que va de ejercicio, según Fotocasa. Se repite con ello la cifra de 2022, aunque resulta notablemente inferior a la registrada en 2021 (34%).

Las negociaciones fueron fructíferas para los inquilinos en el 66% de los casos, dado que se resolvieron con una bajada de precio. Es un porcentaje, sin embargo, tres puntos porcentuales inferior al registrado en 2022, según resalta el portal inmobiliario. Por contra, Fotocasa asegura también que ha aumentando "reveladoramente" el porcentaje de negociaciones que no terminaron bien para los inquilinos, ya que en el 23% de los casos las conversaciones concluyeron con una modificación del precio al alza. El pasado año este porcentaje fue del 17%.

Respecto a los cambios acordados en el precio tras el pacto entre ambas partes, la mayoría (el 72% de los inquilinos) no superó el 10%, repitiéndose así el porcentaje del año anterior. Muchos menos (21% de inquilinos) fueron los acuerdos en los que la rebaja se situó entre el 10% y el 15%.

La negociación es más habitual en el mercado de compraventa

La dinámica del mercado del alquiler contrasta con la del mercado de compraventa. "En el mercado de la compraventa, donde hay más dinamismo, sí que hay un porcentaje equilibrado de compradores que se lanzan a negociar, probablemente para contrarrestar el alza de los tipos de interés hipotecarios", explica Matos. No obstante, la portavoz del portal asegura que también han percibido que en 2023 la negociación en el mercado de la compra ha perdido fuelle. Así, en tan sólo dos años los compradores de vivienda que negocian el precio de compra han bajado seis puntos porcentuales desde el 60% de 2021 al 54% de 2023. En 2022 fueron el 57%.

Fotocasa añade además que el camino de la negociación parece haber reducido su eficacia desde el punto de vista de los compradores, ya que en 2023 acabó con éxito para el 80% de los compradores que negociaron, frente al 84% de 2022.

Respecto al precio, el 76% de los compradores admite haber conseguido una rebaja por debajo del 10% mientras que el 15% de los compradores dice haber conseguido una rebaja entre el 10% y el 15% respecto al precio inicial.