Planas deja al observatorio que vigila los precios de los alimentos en el limbo año y medio

El precio de los alimentos está en boca de todo el mundo. Desde enero del pasado año, cuando escalaron un 4,8% en tasa interanual, no han parado de subir, haciéndolo a doble dígito desde el pasado mes de abril. En enero, tras la supresión del IVA de los alimentos básicos y la reducción de este impuesto del 10% al 5% para los aceites y grasas, lo hicieron el 15,4%. Pero a pesar de esta escalada, que ha encarecido fuertemente la cesta de la compra, el ministro de Agricultura, Luis Planas, ha esperado hasta ahora para convocar al Observatorio de la Cadena Alimentaria, para abordar el problema de los precios de los alimentos con la cadena de valor alimentaria.

El organismo, que reúne a organizaciones agrarias y las cooperativas, las asociaciones que representan a las diferentes compañías distribuidoras y la patronal de las empresas e industrias de la agroalimentación, tiene como cometido "lograr un correcto equilibrio entre los eslabones de la cadena alimentaria, pudiendo garantizarse de esta forma una competencia justa, leal y efectiva. Con ello, se favorece la transparencia y la eficiencia del proceso de comercialización, pudiéndose detectar de esta forma posibles situaciones de desequilibrio en las cotizaciones de los productos a lo largo de la cadena de alimentaria", según recoge la web de Agricultura. El organismo, además, tiene entre sus funciones "analizar la estructura básica de los precios y los factores causantes de su evolución en los distintos eslabones, en los alimentos de mayor importancia relativa en la producción y en el consumo". Pero Planas no lo convocaba desde julio de 2021, antes de que la invasión de Ucrania pusiera en órbita los precios de los alimentos.

Aunque desde el sector disculpan en parte que el Observatorio no se haya reunido porque afirman que la interlocución con Agricultura es "fluida" y el ministerio conoce sus problemas, también dejan entrever que el organismo podría haberse reunido antes para abordar la cuestión puesto que "no tiene una periodicidad fija", a pesar de que ayer Planas asegurase que la va a reunir "con carácter extraordinario".

Problema de costes

Tras cerrar el precio de los alimentos enero con un incremento del 15,4% en tasa interanual, desde el sector de la distribución volvieron ayer a insistir en que, en contra de lo que defiende el ala de Podemos del Gobierno que insiste en topar los precios, "la cadena alimentaria tiene un problema de costes, no de márgenes. El encarecimiento observado de los alimentos está relacionado con un serio problema de costes y no de márgenes. Afecta a todos los eslabones de la cadena de valor, desde productores, a industria y distribución, y todos ellos están haciendo lo posible para amortiguar en sus precios la escalada histórica de las materias primas y la energía, a la que se añaden una fuerte presión regulatoria y fiscal", explican estas fuentes.

En consonancia con estos planteamientos, Planas también reiteró ayer en el Congreso de los Diputados que las causas que han motivado el importante crecimiento de los precios de los alimentos en los últimos meses son el encarecimiento de las materias primas y de los costes de producción en el sector agrario como consecuencia de la guerra en Ucrania. Ante ello, explicó que la acción del Gobierno se ha centrado en paliar el incremento de los costes productivos, con medidas extraordinarias y urgentes que suman casi 2.000 millones de euros; y ayudar a las familias con iniciativas como la rebaja del IVA o un cheque de 200 euros a más de 4,2 millones de familias con rentas de hasta 27.000 euros.

Planas destacó también que en el actual contexto "todos los sectores y eslabones de la cadena [alimentaria] se han comportado muy bien". "Me gustaría señalar el papel de la distribución, que ha reflejado muy fielmente lo que desde el punto de vista legal, era obligatorio, la disminución del IVA, pero con un espíritu positivo, y hago la petición a todos para continuar trabajando conjuntamente en este objetivo", subrayó.

A pesar de que la subida del primer mes del año sigue siendo considerable, lo es tres décimas inferior a la de diciembre. La fuentes consultadas explican a este respecto que "la contribución de los alimentos al IPC ha bajado 16 puntos en enero. Las subidas de los costes de la energía y de las materias primas del primer semestre de 2022 se siguen trasladando a los alimentos, pero su contribución al IPC ha bajado sustancialmente en enero: explican 3,2 puntos de la inflación general en enero, cerca del 54% de la variación total de precios, frente a una contribución del 70% del IPC en diciembre".