Agricultura

Planas marea la perdiz: promesas sin concretar para los agricultores

Ante esta actitud del ministro de Agricultura, el presidente de Asaja, Pedro Barato, lo dejo muy claro: si no hay soluciones, habrá movilizaciones

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis PlanasRober SolsonaEuropa Press

Mañana se cumplirá un mes desde que arrancaron en la provincia de Zamora las movilizaciones de los agricultores y ganaderos. Y ayer tuvo lugar en Madrid una reunión de Luis Planas con los representantes de Asaja, COAG y UPA, con un resultado que siendo generosos bien de puede calificarse de escaso, porque el ministro de Agricultura siguió sin concretar medidas, vamos que mantuvo su línea habitual. Ya no se sabe si es que no puede, no quiere, o ambas cosas a la vez. Prometió y prometió, pero poco más. Dijo Planas que se podrían flexibilizar algunas de las prácticas medioambientales que se exigen, pero está por concretar; anunció que ya verá lo que se hace con el sistema de seguros agrarios y el mal funcionamiento del monopolio de hecho Agroseguro, pero no concretó. Tres cuartos de lo mismo en lo que respecta a las medidas fiscales, sin que se sepa a ciencia cierta lo que se ofrecerá. Así se podría seguir con el resto de las reivindicaciones que han planteado estas tres organizaciones agrarias.

Ante esta actitud de Planas, el presidente de Asaja, Pedro Barato, lo dejo muy claro: si no hay soluciones, habrá movilizaciones. Durante la reunión también estuvo muy presente lo sucedido el martes en el Parlamento Europeo, cuando los eurodiputados aprobaron la llamada Ley de Restauración de la Naturaleza, que supondrá más trabas para producir y más obligaciones de carácter medioambiental para los agricultores y ganaderos , con carácter general, y especialmente para los que se encuentran en la llamada Red Natura, que en España son muchos. Con la que está cayendo en el campo europeo, ¿cómo es posible que se haya dado este paso? Eso no va a hacer sino aumentar el malestar de cara a las elecciones al PE del próximo mes de junio y fomentar las listas electorales más ultras o de grupos antisistema. Mientras tanto, en Abu Dabi la 13 Conferencia Ministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC) está pasando con bastante más pena que gloria, con el capítulo agrario de las negociaciones convertido una vez más en uno de los principales problemas. A esta organización terminaría llegando el asunto de las «cláusulas espejo», suponiendo que alguna vez fuesen aprobadas por la Unión Europea, algo que mucho me temo no llegará a suceder.