Fracaso
Las políticas de Pedro Sánchez hunden un 33% la oferta de alquiler permanente en cinco años
En el mismo periodo, los arrendamientos temporales se han más que triplicado
El Gobierno ha hecho de la política de vivienda uno de sus ejes principales de actuación en los últimos años. Sin embargo, los resultados no reflejan la importancia que desde Moncloa han dado -o querido dar- a la materia. En el caso del alquiler, por ejemplo, la falta de oferta, uno de los principales problemas de este mercado, no sólo no se ha corregido sino que ha empeorado.
Las familias que buscan un alquiler permanente en España en estos momentos encuentran un 33% menos viviendas permanentes ofertadas de las que había en el mercado hace cinco años, según un estudio publicado por Idealista. Por el contrario, durante este periodo de tiempo, la oferta de alquileres de temporada, que escapan a la regulación de precios de la Ley de Vivienda, se ha triplicado, al crecer un 232%.
La capital donde la sangría de oferta de alquiler permanente ha sido mayor es Barcelona, donde la reducción de viviendas disponibles alcanza el 75%. Según Idealista, han desaparecido tres de cada cuatro viviendas ofertadas en la capital barcelonesa. En tres ciudades más la oferta se ha reducido a menos de la mitad: Oviedo (-55%), San Sebastián (-54%) y Las Palmas de Gran Canaria (-51%).
Madrid y Palma se sitúan en quinta posición, con una merma del 46% de las viviendas anunciadas en alquiler permanente, seguidas por Girona (-45%), Bilbao (-44%), Zamora (-42%), Toledo (-42%) y Burgos (-40%). El stock se ha reducido también en el resto de grandes mercados: Sevilla (-38%), Valencia (-33%), Málaga (-33%) Alicante (-20%).
La oferta sólo ha subido en siete capitales: Huesca (con un 112% más), Jaén (55%), Lugo (13%), Cáceres (11%), Cádiz (6%), Teruel y Murcia (4% en ambos casos).
Alquiler de temporada
En paralelo a esta reducción de alquileres permanentes, los de temporada siguen aumentando su relevancia en el mercado inmobiliario.
Entre los grandes mercados, durante estos cinco años, el mayor incremento de la oferta de temporada se ha dado en Málaga (con un 466% más que hace un lustro), Alicante (309%), Sevilla (279%), Valencia (276%), Barcelona (244%), Bilbao (217%) y Palma (208%). Con incrementos inferiores al 200% (que equivale a triplicarse) encontramos Madrid (159%) y San Sebastián (136%).
Los mayores y más espectaculares incrementos de oferta de este tipo se han dado en pequeños mercados donde, según Idealista, este fenómeno era hasta ahora prácticamente inexistente y en los que la aparición de un puñado de anuncios ha provocado subidas muy pronunciadas. Son los casos de Jaén (2.500%), Murcia (1.614%), Tarragona (1.080%), Granada (1.039%) o Castellón de la Plana (1.000%).
Barcelona es la capital en la que el peso de los alquileres de temporada sobre el total del mercado es mayor, alcanzando el 46% del total. Le siguen San Sebastián (38%), Badajoz (30%), Tarragona (26%), Girona (25%) y Cádiz (19%). En las ciudades de Ciudad Real, Melilla, Guadalajara y Ourense este fenómeno solo está presente en el 1% de la oferta disponible.
Sólo en el último año, los datos manejados por Idealista, correspondientes al tercer trimestre, arrojan una reducción del 5% en el volumen de oferta de alquiler permanente disponible en España, con caídas en Barcelona del 38%, seguidas de las de Oviedo (-34%), Tarragona (-31%), Palencia (-31%) y Teruel (-30%). En Madrid la caída ha sido del 9%.
En cuanto al incremento de ofertas de alquiler de temporada en grandes mercados, Palma ha sido donde más ha crecido, ya que hay un 47% más que hace 12 meses. Le siguen Madrid (46%), Valencia (35%), Barcelona (33%), Bilbao (33%), Alicante (30%), Sevilla (20%) y San Sebastián (15%).
Para Francisco Iñareta, portavoz de idealista, "a pesar del espejismo que puede haber supuesto en ciertos mercados la vuelta al mercado de algunas viviendas tras el cambio de la duración de los contratos aprobado en marzo de 2019, la oferta disponible en el mercado sigue cayendo, muestra de que todas las medidas aprobadas en este lustro solo han conseguido reducir al mínimo la oferta de viviendas en alquiler permanente. Esto ha ejercido una enorme presión sobre los precios, ha ampliado la competencia entre familias por hacerse con una vivienda y, en consecuencia, prácticamente ha expulsado del mercado a los más jóvenes y vulnerables. La situación exige la reversión de la mayoría de estas medidas y la búsqueda de un reequilibrio en las relaciones de propietarios e inquilinos que aflore mucho producto al mercado y permita que la situación se normalice”.
✕
Accede a tu cuenta para comentar