Política

Islas Baleares

Radicales insultan a Rajoy y Bauzá por implantar el trilingüismo

Mariano Rajoy, junto a José Ramón Bauzá en Palma de Mallorca.
Mariano Rajoy, junto a José Ramón Bauzá en Palma de Mallorca.larazon

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha advertido hoy de que para continuar en la senda del crecimiento y de la creación de empleo hay que seguir confiando en el PP, y ha hecho una advertencia: "Si queremos volver a la cola, dadle el voto al PSOE o a quien quiere apuntalarlo".

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se dio ayer un difícil paseo por Palma de Mallorca. Al comienzo, en la plaza del ayuntamiento, le esperaba un grupo de manifestantes pro catalanistas y contrarios al decreto de implantación del trilingüismo en Baleares. «Joserra, te quedan dos telediarios», le gritaron al presidente de Baleares, José Ramón Bauzá. El grupo fue interceptado por la Policía. Rajoy y Bauzá continuaron su recorrido y entraron en la tradicional bombonería La Pajarita, donde el dueño le regaló al presidente unos bombones, detalle que agradeció, y dijo que se los daría a sus hijos. Rajoy bromeó entonces con la posibilidad de «venirme aquí» como registrador. Después se pararon a hablar con los dependientes de una tienda de ropa. El paseo fue necesariamente breve, puesto que los insultos no cesaron a su paso. Una familia completa comenzó a gritar la tradicional expresión de Podemos: «Tic, tac, tic, tac». Es ahí cuando los mismos protagonistas profirieron numerosos insultos: «Sinvergüenza», «si me queréis, irse», «os queda poco», e incluso «asesino».

A continuación, se dirigieron al polideportivo de Sont Moix, donde casi 4.000 personas con banderas del PP les esperaban. El jefe del Ejecutivo ofreció allí el primer mitin, en el que se salió del guión y comenzó su intervención ironizando sobre las críticas que insisten sobre su falta de empatía y sobre que no sabe comunicar. «Yo con vosotros y con muchos más comunico bien», y aseguró que «ser empático y comunicar bien viendo todo lo que hay requiere ser un héroe, y ahí no llego». Recordó que lo importante es la gestión y crear empleo.

Volvió a hacer balance de la quiebra en la que se encontró a España, y de que ahora será el país que más crezca en la UE. Habló del pasado pero, sobre todo, del futuro. Tiró de retranca gallega y dio datos, buenas noticias que, dijo, habitualmente no lo son: «Voy a daros noticias de hace 72 horas. Yo no doy noticias antiguas, soy un tipo en la actualidad», y destacó que España está a la cabeza en competitividad.

También recordó los orígenes del PP, «un partido que no se creó en un cuarto de hora, hecho desde la base y no creado en tertulias». Recordó que la esencia del PP, su ADN, apuesta por la Constitución, la unidad española y la soberanía nacional, porque, insistió, «lo que sea España lo dicen los españoles». Un partido que garantiza los derechos, las libertades y la solidaridad, el sistema de bienestar, los servicios sociales... A diferencia de otros partidos. Un partido que ha sabido remontar de las situaciones de crisis, y pidió que no vengan ahora los socialistas a darles lecciones. «Somos una gran nación, con un gran futuro, militancia aguerrida de nuestro partido». Rajoy reclamó el voto para el PP para evitar que políticas fracasadas y caducas frenen la recuperación en España y Baleares y tengan que sufrir los gobiernos socialistas. «Si queremos volver a la cola, dadle el voto al PSOE o a quien quiere apuntalarlo», advirtió. Además, prometió un nuevo modelo de financiación porque «ahora sí se puede» y destacó que antes no se hubiera podido hacer, salvo el PSOE, «que hubiera hecho cualquier cosa».

Por su parte, el presidente de Baleares, José Ramón Bauzá, reclamó ese nuevo sistema de financiación autonómico justo y que se ajuste. «No queremos ser más que nadie, pero no queremos ser menos que nadie», señaló.