Coronavirus

Una vuelta al trabajo caótica: El lío del reparto de 10 millones de mascarillas

Comunidad y Ayuntamiento de Madrid no han recibido pautas sobre cómo se distribuirán a partir de mañana en el transporte público. El Ejecutivo regional alerta de un posible «efecto llamada» en Metro ante el desabastecimiento.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunció ayer que serán los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, las policías locales, las municipales y los miembros de Protección Civil los que repartirán a partir de mañana lunes las mascarillas cuyo uso es recomendable para los ciudadanos que no tengan más remedio que ir a trabajar y tengan que hacerlo en transporte público. En total serán 10 millones de mascarillas.

Markaska destacó que serán también los agentes –que se movilizarán junto a los interinos– los que vigilen que los ciudadanos cumplen con la distancia de seguridad recomendada. «El reparto es solo un apoyo de las medidas de protección de la salud», según indicó el titular de Interior y advirtió de que la etapa que empieza el lunes no supone una relajación de las medidas. En este punto, señaló que el uso de mascarilla es recomendable, no obligatorio, y «si alguien no se la quiere poner, pues no se la pone». «No se va a producir relajación de medidas tras la vuelta al trabajo de los no esenciales, seguimos en fase de confinamiento, y todos tenemos que tenerlo claro», añadió.

Integrarán el reparto, entre agentes y personal de Protección Civil, casi 350.000 personas, que actuarán los próximos lunes y martes y también el miércoles en aquellas comunidades en las que el lunes es festivo. Agentes de seguridad privada viajarán en transporte público para así garantizar que se cumplen las distancias de seguridad, así como la disposición en los andenes.

Sin embargo, no todo el mundo podrá llevarla: no hay suficiente stock. Además, en la guía que ha empezado a difundir el Ministerio para empresas les solicita que protejan a sus trabajadores con el material adecuado: mascarillas, guantes, pantallas aislantes...

Desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) critican la medida de Interior: «Quizá debería apoyarse más para estas labores en la UME. La Guardia Civil debería dedicarse más a labores de seguridad ciudadana», destacó. AUGC se ha enterado por los medios de comunicación de que ellos también van a tener que participar en las labores de reparto. Destacan que para evitar aglomeraciones, el dispositivo tiene que estar muy bien organizado y que las colas no sean muy largas. «En caso de altercados tendremos que actuar», subrayan. Por su parte, el sindicato de Policía Jupol destaca que les parece «perfecto» el reparto, pero los agentes siguen con una «dotación escasa». «Nos dan una mascarilla para tres o cuatro días cuando son de usar y tirar y más aún si has tenido contacto con alguien contagiado».

Tanto la Comunidad como el Ayuntamiento de Madrid se preguntan, a 24 horas del reparto, cómo se va a efectuar, con qué medidas de seguridad para los empleados y, lo más preocupante: ¿puede producirse un «efecto llamada» de la población, desabastecida de mascarillas? Así figura en una carta dirigida al ministro de Transportes José Luis Ábalos por parte de la Consejería de Transporte, liderada por Ángel Garrido. Se desconocen las ubicaciones y el horario concretos en el reparto de mascarillas; si el reparto se va a llevar dentro o fuera de las estaciones, y el número de unidades que se van a repartir y, sobre todo, si son reutilizables, entre otras preguntas.

Si bien ayer, a la espera de las instrucciones del Gobierno, no se habían tomado medidas concretas, una de las líneas de trabajo que se barajaban es que los agentes procedan el reparto dentro de las estaciones, tanto detrás de los tornos como en puestos fijos. Mientras, en las estaciones de ferrocarril también podrían establecerse una serie de puestos para facilitar las mascarillas a los viajeros. El Gobierno, recuerda Garrido, aún está pendiente de entregar a la Consejería de Transportes cerca de 38.000 mascarillas. De ahí que se pregunten si se va a hacer entrega de «mascarillas adicionales» para preservar la salud de los empleados.