Correos LGTBI

Con ocasión de la celebración del «Orgullo», propio de la «ideología de género», la empresa estatal Correos ha decidido pintar buzones y su flota de vehículos con la bandera multicolor.

Está absolutamente fuera de lugar que una empresa como Correos se dedique a pintar y decorar sus símbolos oficiales y públicos, para promover una «ideología» que –por su propia naturaleza– expresa una particular cosmovisión humana y política.

Casi coincidiendo con este hecho, el TS ha dictado una muy importante sentencia relativa a la prohibición de exhibir enseñas y otros símbolos no reconocidos oficialmente, en instancias públicas. Aunque dirigida directamente a la exhibición de símbolos separatistas en las instituciones oficiales en Cataluña, sus argumentos son de alcance y aplicación general.

«Las instituciones públicas tienen el deber de garantizar su neutralidad en la medida en que sirven a todos los ciudadanos…» con independencia de particulares filias o fobias políticas –o sexuales– de sus dirigentes.

De seguirse esta práctica de emplear símbolos del gusto de los políticos de turno según la ocasión, se abre una dinámica complicada: «Correos por la Vida», por el «Cambio climático», «Correos por el yoguiveganismo» y así, cada mes o cada fiesta. Ahora parece argumento suficiente que una Directora General del ministerio Ideología LGTBI, afirme su «orgullo» ante lo realizado por Correos por ser hija y nieta de funcionarios de la casa.

Delito, caciquismo versión 2.0 en estado puro, o estupidez. Seguramente todo a la vez.