Cumbre Iberoamericana
Sánchez anuncia vacunas para América Latina entre críticas de los países por el “fracaso” del reparto
Malestar de los líderes iberoamericanos por la falta de “solidaridad” y la “desigualdad abismal en el acceso a la vacunación”
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, explicará mañana ante el plenario de la La XXVII Cumbre Iberoamericana en la que participará en Andorra, que España pondrá vacunas a disposición de los países de América Latina “en cuanto sea posible”. La propuesta, deslucida porque se ha adelantado previamente desde Madrid, se producirá, además, después de que varios presidentes latinoamericanos hayan criticado hoy la falta de solidaridad en la gestión de las vacunas y el “fracaso” de la iniciativa COVAX que pretende, precisamente, un acceso equitativo a estas dosis. Un clamor con el que se han alineado los líderes de Guatemala, Costa Rica, Chile y República Dominicana. Esta disensión, a la que está por ver si se suman otros países en la jornada de mañana, rompe el clima de unidad dentro de una cumbre que pretendía buscar una respuesta unitaria para futuras pandemias globales, garantizando “una vacunación equitativa en todo el mundo”.
En este contexto se enmarca la propuesta de España, que busca así “reforzar su compromiso con el progreso de la comunidad iberoamericana”. “Trabajaremos, también en estos días, en el diseño de una respuesta coordinada a la crisis sanitaria, económica y social para avanzar en una recuperación sostenible e inclusiva en Latinoamérica”, ha destaco Sánchez en un mensaje en su cuenta de Twitter.
A la espera de que Sánchez formalice su propuesta ante el plenario, el ambiente no es el más proclive. Durante el Conversatorio del XIII Encuentro empresarial iberoamericano, en el que ha participado Sánchez, el presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, se ha mostrado muy crítico con la iniciativa COVAX, para un acceso equitativo mundial a las vacunas de países con menos recursos, que ha calificado de “fracaso” en dos ocasiones. Giammattei ha reconocido que su país pudo encarar la inoculación de la primera dosis de vacunas gracias a la ayuda que le prestó la India -porque de los tres millones comprometidos, apenas les han llegado 81.000 dosis- y que ahora en Guatemala se han lanzado a adquirir dosis de la vacuna rusa.
“Acabamos de comprar Sputnik y estamos por recibir el primer cargamento, fuera del mecanismo COVAX que es un fracaso”, ha señalado. El presidente guatemalteco ha criticado que “un pequeño grupo de países tenga todas la vacunas y la gran cantidad de países no tenemos acceso a la vacuna” y ha pedido trabajar por “un mundo más solidario”, porque “cada vez hay brechas más grandes entre los países que más tienen y los que menos tienen”.
Posteriormente, también el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, ha criticado “la desigualdad numérica abismal que existe en el acceso a la vacunación”. “Un 53% de las vacunas vendidas están en manos de un 16% de la población, es decir, los países más ricos”, ha censurado. “Para una recuperación global, no habrá seguridad hasta que todos estemos vacunados”, ha señalado Alvarado, una apreciación que ha compartido palabra por palabra también desde Chile, Sebastián Piñera. Sánchez ha recogido el guante en su intervención posterior, de cierre del coloquio, en la que ha compartido que “no vamos a estar seguros, hasta que todos estemos seguros”. “Hay muchísimo que hacer en este ejercicio de solidaridad. La solidaridad es una de las principales lecciones que sacamos de esta crisis”, ha finalizado.
En un hecho insólito, el anuncio lo avanzó la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, puntualizando que sería “tan pronto como sea posible”, teniendo en cuenta las “incidencias” en las entregas de vacunas que está habiendo con algunos laboratorios. “Serán tenidos en cuenta a la hora de aplicar este compromiso”, ha dicho.
Ensalzando el diálogo social
En una primera intervención, en el marco del XIII Encuentro empresarial iberoamericano, el presidente del Gobierno ha exaltado la importancia del diálogo social y el “sentido de la responsabilidad” de empresarios y sindicatos que, durante el envite del virus, han antepuesto el interés general sobre sus propios intereses, algo que da muestra de la “salud de nuestra democracia”. “Una de las lecciones que deja esta pandemia es que la política por sí sola, la empresa por sí sola o la ciencia por sí sola no bastan. Es fundamental la unión, el diálogo y el acuerdo”, ha señalado Sánchez.
El jefe del Ejecutivo ha reconocido que “ningún gobierno estaba preparado” para una crisis sanitaria de esta envergadura y ha confesado que la “decisión más difícil” durante la pandemia fue “tener que ponerse en el Congreso de los Diputados delante de los diputados para proponer el confinamiento total de su población para evitar la propagación del virus”. Frente a este desafío, Sánchez ha defendido la receta de su Gobierno para superarla: “resistencia, reactivación y recuperación”. Resistencia, en forma de mecanismos como los ERTE, el Ingreso Mínimo o los avales del ICO para sostener el tejido productivo. Reactivación, con nuevos instrumentos para dar mayor la liquidez, animar la inversión y consolidar la recuperación; flexibilizando también los ERTE para entrar y salir de los mismos, conforme se abría o restringía la actividad. Y, por último, la recuperación con un real decreto ley con 11.000 millones de euros para los sectores más afectados.
✕
Accede a tu cuenta para comentar