Inmigración

El Parlamento Europeo pide la comparecencia de Marlaska por la tragedia de Melilla

La comisión de Libertades Civiles, Justicia e Interior (LIBE) de este organismo sopesa además enviar una misión a la ciudad autónoma y a Marruecos

El Parlamento Europeo ha solicitado este jueves la comparecencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en la comisión de Libertades Civiles para explicar lo sucedido el pasado 24 de junio, cuando al menos 23 inmigrantes murieron al intentar saltar la valla de Melilla para llegar a nuestro país a través del paso fronterizo de Marruecos. De aceptar la invitación, esta comparecencia podría tener lugar en el mes de septiembre. Esta solicitud ha tenido lugar tras la reunión del grupo de coordinadores de esta comisión a instancias del eurodiputado del Anticapitalistas, Miguel Urbán.

No es la primera vez que las instituciones europeas analizan lo sucedido en Melilla. El pasado 5 de julio se celebró un debate en el Parlamento Europeo dedicado exclusivamente a estos hechos con la presencia de la comisaria de Interior Yvla Johansson que calificó como “viernes negro” la tragedia sucedida ese día. La política noruega pidió una investigación para esclarecer lo sucedido. ”Hay que hacer todo lo posible por salvar vidas y tratar a la gente con respeto y conformidad con sus derechos”, aseguró  Johansson que dedicó parte de su intervención a cargar contra las mafias que incentivan las llegadas irregulares al Continente europeo y subrayó la “gran presión” que tuvieron que afrontar los agentes que estaban ese día trabajando en la frontera de Melilla.

Desde el pasado viernes 24 de junio se ha confirmado la muerte de al menos 23 personas después de que 2.000 migrantes de origen subsahariano intentaran cruzar la valla de Melilla, pero diversas organizaciones humanitarias aseguran que la cifra real de fallecidos podría ser mayor- hasta 37- y exigen una investigación inmediata para esclarecer las causas del suceso y la actuación tanto de los cuerpos policiales marroquíes como la de los españoles. La Unión Africana  y Naciones Unidas también han pedido una investigación y el  último organismo en unirse a estas voces ha sido el Consejo de Europa. La comisaria de Derechos Humanos de esta institución, Dunja Mijatovich, ha defendido una “investigación independiente, completa y efectiva”  en una carta remitida el pasado 1 de julio y hecha pública este pasado miércoles. Además, en esta misiva Mijatovich ha subrayado que la cooperación entre España y Marruecos puede “exponer a los migrantes y demandantes de asilo al riesgo de violaciones de los derechos humanos”.

Aunque España responsabiliza de lo ocurrido a las mafias que se dedican al tráfico de personas, la polvareda levantada ha hecho que tanto la Fiscalía como el Defensor del Pueblo hayan anunciado sus intenciones de investigar lo sucedido. Si bien  el presidente de gobierno, Pedro Sánchez, en un primer momento  calificó la llegada masiva de migrantes como un “violento asalto” contra la “integridad territorial” del país y respaldó la actuación de las fuerzas de seguridad a ambos lados de la frontera, después reconoció no haber visto las imágenes cuando realizó estas declaraciones y lamentó las muertes.

Ya en este debate en la Eurocámara,  el eurodiputado de Anticapitalistas aprovechó su intervención para pedir la dimisión de Grande- Marlaska. Para Urbán, “las muertes en la frontera de Melilla son una masacre, asesinatos provocados por la Europa Fortaleza. En nuestra opinión, estas muertes tienen culpables y ese es el Régimen marroquí. Pero también responsables, el Gobierno español que lleva décadas haciendo del racismo institucional la política fronteriza”. PSOE, PP y Ciudadanos también cargaron contra el Gobierno de Pedro Sánchez por la gestión de esta crisis durante el debate en el hemiciclo.

El máximo representante de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, consideró  en una visita a Madrid “absolutamente imprescindible” que se analice “exhaustivamente” estas muertes mientras el vicepresidente del Ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas calificó  como “uso excesivo de la fuerza” los hechos ocurridos en la frontera entre España y Marruecos.