Memoria Histórica

España suma nuevos espacios de Memoria Democrática: del monumento a los abogados de Atocha a la recuperación de Vía Laietana 43

Estos tres nuevos espacios se suman al inventario de Lugares de Memoria Democrática, que ya suma más de tres decenas

El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, durante una reunión en la sede del Ministerio, a 16 de julio de 2025, en Madrid (España). El encuentro tiene lugar en el contexto de la gestión y protección de menores migrantes y solicitantes de asilo en España, especialmente tras la reciente solicitud del Gobierno al Tribunal Supremo para poder trasladar a menores migrantes no acompañados desde Canarias a otras comunidades autónomas, ante el rechazo de algunas r...
El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres.Jesús Hellín Europa Press

La Memoria Democrática es uno de los grandes hitos y banderas del Gobierno de Pedro Sánchez. Así lo ha sido desde su llegada a La Moncloa en 2018, y desde entonces el Ejecutivo socialista -ahora en coalición con Sumar- ha impulsado un ambicioso marco normativo y político destinado a reconocer a las víctimas de la dictadura franquista, garantizar su derecho a la verdad y fomentar una cultura democrática basada en los principios de justicia y reparación.

En este marco, el Gobierno ha dado un nuevo paso al iniciar los trámites para incorporar tres nuevos espacios al listado de aquellos reconocidos como Lugares de Memoria Democrática. En esta ocasión, el Boletín Oficial del Estado (BOE) publica hoy la apertura de un periodo de información pública en el procedimiento de declaración como Lugar de Memoria Democrática del edificio situado en Vía Laietana, 43 (Barcelona), del monumento en conmemoración de los abogados de Atocha (Madrid) y de la Colonia Agrícola Penitencia de Tefía, situada en la isla de Fuerteventura.

Con esta orden, el Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática, dirigido por Ángel Víctor Torres, inicia el procedimiento para declarar oficialmente tales emplazamientos -que fueron utilizados para la represión durante el periodo franquista- como Lugar de Memoria Democrática, aunque primero tendrá que expirar el plazo de 20 días marcado en la orden ministerial para que cualquier persona interesada pueda examinar el expediente y presentar alegaciones, observaciones o documentos que considere relevantes.

Represión contra el sindicalismo, el colectivo LGTBI y la libertad de asociación

Los tres espacios que el Gobierno de España quiere incorporar a la lista de Lugares de Memoria Democrática tienen un vínculo en común: todos ellos fueron utilizados como lugares de represión por la dictadura franquista que imperó en España durante cuatro décadas.

El monumento a los abogados de Atocha, en Madrid, recuerda a las víctimas del atentado del 24 de enero de 1977, en el que un grupo de extrema derecha asesinó a cuatro abogados laboralistas y un sindicalista vinculados al Partido Comunista de España y a CCOO, e hirieron de gravedad a otras cuatro personas; en plena Transición, apenas un año después de la muerte de Franco.

Por su parte, el Gobierno quiere reconocer la Colonia Agrícola Penitencia de Tefía (Fuerteventura) como Lugar de Memoria Democrática por la represión que allí sufrió el colectivo LGTBI durante el régimen dictatorial. La Colonia fue inaugurada en 1954 como un centro de internamiento para albergar a homosexuales condenados bajo la Ley de Vagos y Maleantes, que fue reformada ese mismo año para incluir la homosexualidad como un "estado peligroso". El establecimiento estuvo en funcionamiento hasta 1966, y durante los 12 años de actividad sometió a los allí represaliados a trabajos forzados, condiciones insalubres y malos tratos.

Sin embargo, en el caso del edificio ubicado en la Vía Laietana, 43 (Barcelona), hay que remontarse a finales de la dictadura de Primo de Rivera, cuando se inauguró el inmueble. De esta manera, desde su inauguración en 1929, el edificio comenzó a operar como Jefatura Provincial de Policía, y después albergó sucesivamente la Comissaria General d’Ordre Públic y, desde 1941, la Jefatura Superior de Policía franquista, sede de la Brigada Político-Social, encargada de perseguir a disidentes políticos.

Durante la dictadura franquista, el inmueble fue centro de represión y torturas, donde se detenía a antifranquistas, sindicalistas, personas del colectivo LGTBIQ+ y prostitutas y gitanos, entre otros, muchas veces sin delito previo. Según datos oficiales, se estima que al menos 4.143 personas fueron detenidas en Barcelona por motivos políticos, siendo muchas llevadas a Via Laietana, donde sufrían maltratos sistemáticos, por lo que finalmente el edificio se convirtió en un símbolo de la represión franquista en Cataluña.