Irene Montero: Entre 'Solo Sí Es Sí' y 'Caso Rubiales'

Aunque el mensaje puede parecer sólido en su intención de apoyar a las mujeres, la ironía y la hipocresía se tornan evidentes al observar su postura en el reciente "Caso Rubiales" y su defensa de la ley del "Solo Sí Es Sí".

El mismo mensaje de "Solo Sí Es Sí", que representa la importancia del consentimiento en las relaciones sexuales, es utilizado por los usuarios en redes sociales para recordarle las contradicciones de su postura. La ley que Montero celebra como una victoria feminista y como una respuesta a las demandas de justicia y seguridad para las mujeres, ha sido criticada por su impacto en casos de reducción de penas para agresores sexuales.

La ley ha sido criticada por haber reducido las condenas de al menos 1.127 agresores y haber permitido la excarcelación de al menos 115 agresores sexuales y pederastas. Estos datos contrastan fuertemente con el discurso de proteger a las mujeres y garantizar su seguridad y bienestar sexual. La brecha entre la retórica y la realidad parece ampliarse aún más al observar los resultados de esta legislación.

Mientras Montero utiliza su plataforma para denunciar el machismo y apoyar a las víctimas, las críticas señalan su falta de coherencia al abordar el "Caso Rubiales". Algunos argumentan que si se defiende con fuerza el consentimiento y el respeto hacia las mujeres, debería aplicarse en todas las situaciones, incluyendo las relacionadas con el beso de Rubiales a Jenni Hermoso. La indignación en las redes sociales es palpable, destacando que las acciones de los líderes deben reflejar sus discursos.

La crítica hacia Irene Montero no solo radica en su apoyo a la ley del "Solo Sí Es Sí", sino en cómo esta defensa se alinea o contrasta con su respuesta al "Caso Rubiales". La sociedad busca autenticidad en la voz de sus líderes, y es en estas situaciones donde la hipocresía y la coherencia se vuelven fundamentales para el diálogo sobre cuestiones de género y empoderamiento.