Interior

Una promesa sin cumplir: ocho años esperando una medalla

Ismael Derdabi sufrió un accidente laboral en 2017 y tuvo que pasar a la jubilación en la Policía Nacional

El policía al que prometieron una medalla tras ser jubilado en un accidente
El policía al que prometieron una medalla tras ser jubilado en un accidenteLR

Ismael Debabi perseguía a un ladrón cuando se precipitó desde el techo de un colegio en Ceuta en 2017. Este agente de la Policía Nacional sobrevivió a la caída, de más de diez metros, pero sufrió unas secuelas que le obligaron a jubilarse. Cuando tenía todo preparado para recibir una medalla por sus años de servicio, su nombre desapareció de las listas. Un misterio que sigue sin resolverse ocho años después.

Debabi volvió a nacer el 8 de octubre de 2017. Una intervención de las más habituales, perseguir a un delincuente, casi le cuesta la vida. Se desplomó desde el techo del colegio García Lorca de Ceuta. Fue trasladado rápidamente al hospital donde quedó ingresado varios días en la UCI con pronóstico muy grave.

Se llegó a temer por su vida. La forma de la precipitación fue clave para que hoy Ismael pueda contarlo. Sufrió la rotura de la cadera y de un hombro por el impacto contra el suelo. A pesar de ese operativo, el ladrón no pudo ser detenido ese día.

Este policía nacional jubilado, que pertenecía al área de Seguridad Ciudadana, resta importancia a su heroica acción y la califica de un "accidente laboral en acto de servicio", según declaraciones a LA RAZÓN. Sin duda, esta intervención le dejó "lesiones de carácter grave" cuando tenían tan solo 35 años y una larga proyección en la Policía.

"Como consecuencia directa de dicho accidente, y tras un largo proceso médico, pericial y administrativo, se me reconocieron secuelas permanentes que limitan de manera significativa mi capacidad funcional para el desempeño de las tareas propias del cargo", afirma. Fueron meses de operaciones y de mucha rehabilitación para al menos recuperar una parte de su vida.

Una resolución administrativa certificó su jubilación por "incapacidad permanente" y se le reconoció que fue en acto de servicio. Una de las alegrías que tuvo en este complicado camino fue cuando le prometieron la medalla al mérito policial con distintivo rojo, una de las más cotizadas dentro de la institución.

De recibir una invitación a no estar en la lista

Ismael, junto con un compañero que también resultó herido en la frontera, iba a ser uno de los agraciados a recibir este premio en 2018. Los días pasaban y no había noticia que alterase esta decisión. Este agente llegó a recibir las invitaciones al acto para que le acompañaran sus familiares a la gala.

Con todo preparado, y como se dice con el traje de gala desempolvado, su sindicato, el Sindicato Unificado de Policía (SUP), le comunicó que se habían publicado la lista de condecorados y no figuraba su nombre. Nadie le supo decir qué había pasado.

"A pesar del carácter profesional del accidente y de las secuelas permanentes derivadas del mismo, hasta la fecha no me ha sido concedida la Medalla Roja al Mérito Policial, distinción destinada a reconocer actos de servicio en los que se produzcan lesiones graves o consecuencias permanentes como las aquí descritas", remarca en declaraciones a este medio. La lucha por este reconocimiento sigue vigente.

¿Por qué se le negó aquella medalla cuando todos estaban a favor de la misma e incluso hoy sigue siendo respaldada?. Una pregunta que sigue en el aire y que aún no ha recibido respuesta. Y es que el apoyo a Ismael ha sido unánime. El SUP le premió en su asamblea nacional con el "Giraldillo". Este reconocimiento es el más alto que entrega el sindicato a la labor policial.

"Desconozco totalmente lo que pasó. Yo nunca tuve noticias, nunca me llamaron. Al mes siguiente me avisaron de Personal para entregarme mis cosas, ya que pasé a jubilado, pero nunca me dieron una razón. Las personas o la persona que creo que fueron las partícipes de eso están donde tienen que estar, en Madrid o donde sea", explica este policía jubilado.

Jubilado con 35 años

Derdabi siempre ha agradecido al SUP todo su apoyo. Un sindicato al que sigue vinculado con tareas de asesoramiento. Precisamente, esta entidad subraya que peleará para que la labor de Ismael sea reconocida, ya que aún queda tiempo al no haberse cumplido el plazo máximo permitido. Este periodo es de una década y aún tienen dos años para plantar batalla.

El distintivo rojo en la Policía Nacional es la máxima condecoración por actos de valor, para aquellos que han puesto en riesgo sus vidas por el servicio. Se otorga por acciones como ser herido en servicio (con excepciones) o por tres o más servicios donde haya habido agresión con armas. También se puede premiar una conducta destacada que merezca una recompensa especial por actos extraordinarios con riesgo personal.

La condecoración está aparejada a una pensión, por lo que se puede entender que es un beneficio que los agentes reciben tras jubilarse y por las acciones realizadas en servicio. Una ilusión y una promesa que lleva esperando Ismael más de ocho años.