Ni Cáceres ni Mérida: esta es una de las ciudades medievales más bonitas de España con dos catedrales

Viajar es uno de los placeres de los que puede disfrutar el ser humano. Viajes por todo el mundo, a sitios recónditos del mundo, por tierra, mar y aire... Pero, últimamente, se han popularizado los viajes por el territorio nacional para descubrir los maravillosos parajes naturales y urbanos, llenos de historia, que esconde España.

A menudo comparamos destinos internacionales con lugares de nuestro propio país porque, por su belleza e historia, nos recuerdan a sitios increíbles y populares por su patrimonio arquitectónico, histórico y cultural. Tanto es así, que España recibió el pasado 2023 a más de 85 millones de turistas. Así lo señala el Instituto Nacional de Estadística en un informe que muestra unos datos que posicionan a España como el segundo país más visitado del mundo por detrás de Francia.

En este sentido, en Extremadura existe una localidad, cuyos orígenes se remontan a la época romana, que tiene uno de los complejos arquitectónicos más impresionantes de nuestro país: Plasencia. Aquí te contamos sus orígenes y una de sus peculiaridades más sorprendentes.

Una ciudad clave en la Reconquista

Plasencia, situada en el norte de la provincia de Cáceres, en Extremadura, fue fundada en 1186 por el rey Alfonso VIII de Castilla como una plaza estratégica para consolidar el avance cristiano en la Reconquista. La ciudad, cuyo lema es "Ut placeat Deo et hominibus" ("Para agradar a Dios y a los hombres"), se erigió sobre un antiguo asentamiento romano, aunque su importancia creció significativamente durante la Edad Media.

Además, su ubicación privilegiada, en el Valle del Jerte, y su proximidad a la frontera con los reinos musulmanes, la convirtieron en un bastión defensivo, dotándola de una muralla que en su momento contó con 71 torres y varias puertas monumentales, muchas de las cuales se conservan en la actualidad.

Por otro lado, Plasencia destaca también por su rica arquitectura religiosa y civil, con un patrimonio notable, siendo una de las pocas ciudades españolas que cuentan con dos catedrales. Así, la Catedral Vieja, de estilo románico y gótico temprano, y la Catedral Nueva, de estilo gótico-renacentista, son dos de los principales hitos arquitectónicos que dominan el casco histórico.

Además, la ciudad cuenta con múltiples iglesias, como la de San Nicolás y San Martín, y edificios civiles, entre los que sobresalen el Palacio de los Marqueses de Mirabel y el Parador de Plasencia, antiguo convento. De esta manera, estos monumentos, junto con sus calles empedradas y plazas históricas, hacen de Plasencia un importante centro cultural y turístico en Extremadura.