De Tino Casal a Nino Bravo: los otros cantantes que se dejaron la vida en la carretera

Gracias a las campañas de concienciación y a la apuesta de los fabricantes por mejorar las medidas de seguridad, las cifras de siniestralidad de los accidentes de tráfico han caído en los últimos años. Sin embargo, la carretera sigue siendo una de las principales causas de mortalidad en el mundo, también para los cantantes. Con la muerte de Patxi Andión recordamos la triste lista de artistas del mundo de la música que se dejaron la vida en el asfalto.

Nino Bravo

El 16 de abril de 1973 Luis Manuel Ferri Llopis, Nino Bravo, fallecía en un accidente de tráfico que se produjo en la localidad conquense de Villarrubio. Una de las voces más representativas de la historia musical española se apagó en una fatídica curva cuando conducía un BMW 2800 de 1970 camino a Madrid desde su Valencia natal. Se la salió de la vía y dio varias vueltas de campana. Viajaba acompañado por su guitarrista y amigo José Juesas Francés y el Dúo Humo. Todos los ocupantes fueron trasladados con vida a un pequeño hospital de monjas mercedarias llamado Santa Emilia en la localidad de Tarancón, a 13 kilómetros del lugar del suceso. Después, en la única ambulancia del pueblo, los derivaron a la capital, un trayecto que Nino Bravo no pudo concluir. Ingresó ya fallecido en el Centro Sanitario Francisco Franco de Madrid (actual Hospital Gregorio Marañón). La causa oficial de la muerte fue un hemoneumotórax y diversos politraumatismos en la región abdominal consecuencia, según los investigadores, de no llevar puesto el cinturón de seguridad. Por aquel entonces su uso no era obligatorio.

Tino Casal

La luz de uno de los asturianos más internacionales se extinguió en la capital la mañana del 22 de septiembre de 1991. El cantante se dirigía a su casa con unos amigos cuando a causa del exceso de velocidad el Opel Corsa en el que viajaba como copiloto derrapaba en la M-500 a la altura de la calle Castilla, a apenas 400 metros del Puente de los Franceses, e impactaba con una farola. Como en el caso de Nino Bravo, Tino Casal tampoco llevaba puesto el cinturón de seguridad, por lo que el impacto le provocó que una de sus propias costillas le traspasará el corazón. Fue la única víctima y falleció en el acto. Como curiosidad, o más bien como una prueba de los caprichos del destino, el cantante, declarado aficionado a los temas vampíricos, había respondido una semana antes durante una entrevista que “solo moriría con una estaca atravesándole el corazón”.

Cecilia

La niña preferida de la música española, la gran promesa, volvía de dar un concierto en Vigo cuando se encontró con la muerte a la altura de Benavente. Fue en la colina de Tres Montes, en la provincia de Zamora, donde Evangelina Sobredo, Cecilia, exhaló el último aliento cuando solo contaba con 27 años. Su vehículo chocó contra un carro agrícola que circulaba sin luces y que transportaba dos vacas. En el Seat 124 se encontrabantres músicos, dos de los cuales se salvaron con heridas de distinta consideración. Tanto Cecilia, que estaba dormida en ese momento, como su batería, Carlos de la Iglesia, murieron en el acto. Sus restos reposan en el cementerio de la Almudena.

Manolo Caracol

El cantaor de flamenco Manuel Ortega Juárez, conocido por todos como Manolo Caracol, el que fue pareja de la gran Lola Flores, falleció en Madrid cuando se dirigía a su tablao Los Canasteros. Tenía 63 años. La fatalidad se encontró con él en la carretera de la Coruña, en una maldita curva a la altura del Puente de Los Franceses. Su coche, conducido por su chófer, derrapó por el fuerte viento y acabó estrellándose contra un poste. Como señal de duelo, Los Canasteros permaneció cerrado durante cinco años.

Jesús de la Rosa

El alma de Triana se fue lejos de su tierra. En una carretera de Burgos y con solo 35 años la vida de Jesús de la Rosa se apagó cuando estaba casado y tenía dos hijos, uno de ellos recién nacido. Era el 3 de octubre de 1983 y se dirigía a Madrid desde San Sebastián cuando se cruzó en su camino una furgoneta. Aunque llegó con vida a quirófano, los médicos no pudieron hacer nada por salvarle.