Angelina Jolie, tras los pasos de Rocío Carrasco

Tras más de diez años de conviviencia y seis hijos en común, Angelina Jolie y Brad Pitt acordaron el fin de su matrimonio. Sin embargo, la pareja sigue enfrentada en los tribunales. Primero fue por la custodia de sus hijos y, meses después, por la violencia machista sufrida durante su relación.

Los abogados han recomendado a la protagonista de Maléfica que de momento no haga ningún tipo de declaraciones, hasta el fin de su batalla legal. Sin embargo, la actriz está cansada, según su círculo íntimo, de que la prensa la retrate como “la mala de la película”. “Angie cree que se ha estado mordiendo la lengua durante años, ya que su caso legal sigue en curso. Pero eso no la callara cuando llegue el momento”, afirma una fuente cercana.

Según los medios estadounidenses, la artista podría estar planteándose hablar sobre su matrimonio con Brad Mitt bien a través de una docuserie del estilo de “Rocío: contar la verdad para seguir viva”, o bien a través de una entrevista similar a la que los duques de Sussex concedieron a Oprah Winfrey y que hizo tambalear a la monarquía inglesa.

El divorcio se está convirtiendo en el más largo y complicado de Hollywood ya que la actriz no quiere compartir la custodia de sus hijos al cincuenta por ciento ni tampoco quiere vivir en Estados unidos. La defensa de la actriz asegura tener testimonios y documentos que acreditan el comportamiento violento de Brad Pitt durante su relación con Jolie.

Según fuentes cercanas al actor que cita Us Weekly, “los niños han sido utilizados por Angelina para dañar a Brad en otras ocasiones. Esta filtración de documentos por parte de su cuarto o quinto grupo de abogados se hizo para lastimar a Brad”. El actor fue investigado y absuelto por el FBI por un presunto delito de abuso infantil tras separarse. Los hechos se remontan al 14 de septiembre de 2016, cuando en un vuelo de Francia a Los Ángeles, se acusó a Pitt de estar borracho y de insultar e intentar pegar a su mujer, poniéndose Maddox en medio para evitar la agresión.