Las diferencias de Guillermo y Máxima de Holanda con Felipe y Letizia educando a sus hijas: “No son ciegas ni sordas”

Mucho se ha escrito sobre las supuestas restricciones que los Reyes Felipe VI y Letizia imponen a sus hijas en lo que al uso de las nuevas tecnologías se refiere. Por lo visto, no les permiten tener redes sociales, navegar en Internet durante mucho tiempo o ver la televisión pasadas ciertas horas, todo con el objetivo de protegerlas frente a las críticas o comentarios negativos que podrían leer y escuchar sobre ellas, teniendo en cuenta que, a pesar de ser menores, están muy expuestas a la opinión pública.

Igual sucede en el caso de la princesa Amalia de Holanda, la heredera al trono de los Países Bajos, y sus hermanas, Alexia y Ariane. Los medios neerlandeses y europeos han puesto el foco en estas tres jóvenes de la casa de Orange-Nassau, pero, a diferencia de los Reyes Felipe VI y Letizia, los Reyes Guillermo Alejandro y Máxima de Holanda sí exponen a sus hijas a todo lo que se publica de ellos, con el fin de prepararlas para su futura vida pública. “No son ciegas ni sordas, lo ven todo en las redes sociales, lo leen todo, lo oyen todo. No las aislamos de nada. Y hablan de ello”, ha revelado el jefe de Estado.

El monarca reconoce que algunos mensajes y críticas “les afectan”, aunque parece que confían en ellas y prefieren dejar en su mano la gestión de esta situación.

Del mismo modo, con sus palabras ha confirmado que sus hijas poseen cuentas en sus redes sociales, aunque no de forma oficial. La única de este tipo es la de la Casa Real de Holanda, en la que se publican imágenes de toda la familia o comunicados.

Precisamente, en verano de 2018, la princesa Alexia se vio envuelta en una polémica después de que se diera a conocer que poseía un perfil de Instagram con un nombre falso, con el que pedía opinión a sus seguidores sobre sus estilismos e incluso se defendía a sí misma de las críticas que recibía, como si se tratara de otra persona.