Denuncia
El parte de lesiones de Juls Janeiro tras la pelea con su ex: golpe en la cabeza y dolor de costado
La joven asegura que se siente “perseguida” por Brayan Mejía
Desde ‘Sálvame’ se venía manifestando en los últimos días cierta preocupación hacia Juls Janeiro, la hija de Jesulín de Ubrique y María José Campanario, tras captar imágenes suyas acudiendo a un hospital junto a su novio, Álex Balboa, para ser atendida de urgencia. Más tarde se dio a conocer que la joven se había visto envuelta en una pelea con su exnovio, el también futbolista Brayan Mejía, en cuya casa vivía en Getafe. Desde entonces, parece que la hermana de Andrea Janeiro ha estado pasando por una auténtica pesadilla y ha decidido poner cartas en el asunto acudiendo a las autoridades policiales.
Según explicó Kike Calleja en ‘Sálvame’, el exnovio de Juls Janeiro la esperó a ella y a su novio a la salida de una discoteca con la intención de increparles. Amenazó a la joven con acudir a un plató de televisión para compartir detalles íntimos sobre su relación y la situación alcanzó cotas de tensión muy elevadas, hasta el punto de que llegaron a las manos. “Hay un forcejeo, Brayan increpa a Álex, Juls se mete por medio para intentar que no llegue la cosa a mayores, cae al suelo y se hace daño”, explicó el reportero. El accidente causó algunos daños a la hermana de Andrea Janeiro: “le dolía el codo, el hombro y el costado derecho y tenía un golpe en la cabeza”.
Después de este incidente, Juls Janeiro ha decidido interponer una demanda contra Brayan Mejía, con quien mantuvo una relación que define “como un auténtico infierno”, tanto antes como después de su romance.
De momento, ninguno de los protagonistas se ha pronunciado al respecto. Ni siquiera Juls Janeiro, que suele ser muy activa en sus redes sociales, se ha dirigido a sus seguidores en los últimos días. Por lo visto, la joven está pasando por uno de los momentos más complicados de su vida, aunque siempre podrá contar con el apoyo de sus padres y seres queridos.
Incluso Belén Esteban le mandó un inesperado mensaje de cariño: “No voy a comentar nada. Solo voy a decir que tienen un problemón. Ojalá todo salga bien. Cuando tu hijo tiene 18 años, y todos hemos tenido esa edad y no te das cuenta de nada… Yo entiendo a esos padres. Entiendo a esos padres preocupados por esa niña”.
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