Testimonio
Antonia Dell’Atte acusa a Alessandro Lequio de malos tratos: "La primera patada, estando embarazada, fue a la vuelta de la luna de miel"
La exmodelo reclama a Igualdad mecanismos de control o sanción para aquellos formatos televisivos que "banalizan el sufrimiento de las víctimas en nombre del espectáculo"
Antonia Dell’Atte y Alessandro Lequio protagonizaron una de los romances más tormentosos y mediáticos en los años ochenta y noventa. Ambos formaban parte de la alta sociedad italiana y se conocieron muy jóvenes. Ella era modelo de Armani y a él, conde romano, ya le perseguía la fama de seductor. De la relación nació, en 1988, su hijo Clemente.
"Una pesadilla"
Tuvieron una convivencia conflictiva y marcada por los celos, las infidelidades y los enfrentamientos públicos, según ha descrito Antonia desde entonces, definiendo sus vivencias como "una pesadilla". Ahora ha vuelto a ello en una entrevista con "El País" en la que narra nuevos episodios y explica que denunció al colaborador de televisión en su día por violencia machista y, a pesar de que la retiró, años más tarde la justicia le dio la razón.
"La primera patada que me dio Lequio, estando embarazada, fue a la vuelta de la luna de miel. Llegamos, abrí el buzón, cogí una carta con mi nombre y dijo: tú ya no te llamas Antonia Dell'Atte, tú eres la condesa Lequio", describe. Ella entonces le respondió: "No, yo soy Antonia Dell'Atte", y ahí llegó, la primera patada y mi gran pesadilla".
Tras su ruptura, Antonia se instaló en España y su historia se convirtió en tema recurrente en la prensa del corazón, especialmente cuando Alessandro comenzó su nueva relación con Ana Obregón a principios de los noventa. Aquello encendió un triángulo mediático de gran expectación.
Antonia intervino en varios programas denunciando que había sufrido maltrato psicológico. El 13 de octubre de 1993 protagonizó uno de los momentos más polémicos de la historia de la televisión durante la emisión de "La máquina de la verdad", en Telecinco. Tan duras fueron las acusaciones contra Ana Obregón, a la que llamó "tonta, fantasiosa, mentirosa, sinvergüenza y de inteligencia muy corta", y contra su hijo, que tres días después, el Ministerio de Educación y Ciencia emitió un comunicado advirtiendo que la emisión en horario vespertino vulneraba el código de protección de la infancia, por el contenido de las acusaciones y los insultos.
"Manipulación mediática"
Con los años, Antonia ha hablado de los malos tratos sufridos en diferentes entrevistas y programas como "MasterChef Celebrity" o "Lazos de sangre", insistiendo en que fue una mujer traicionada y maltratada emocionalmente. De hecho, llegó a publicar en sus redes sociales la denuncia que interpuso contra el colaborador de televisión en 1991, denuncia que retiró por la manipulación que sufría entonces.
Años más tarde, Dell' Atte tuvo que hacer frente a una denuncia por calumnias que su ex presentó después de que la italiana le llamase maltratador en público, tal y como recuerda en la entrevista a "El País". La justicia le dio a ella la razón. "¿Si yo no hubiese encontrado esas cartas que él reconoció ante el juez que escribió? Hubiese tenido que resarcirlo económicamente. Yo a él. Mientras, en la tele se habla de trapos sucios. No son trapos sucios, son malos tratos".
Cuenta también cómo la fue aislando de su entorno. "Me enteré de que llamaba a mis amigos y los amenazaba si no me dejaban en paz". Mientras, sufría, según dice, el acoso de los medios. Se la llamó "despechada, loca, mala madre". "Tenía que proteger a mi hijo, tenía muchas presiones, estaba sola en España, y no tenía pruebas", declara en la entrevista.
Dell' Atte aprovecha para lanzar una crítica a la prensa y a las televisiones: "Más que blanqueamiento. Son manipuladores, desinforman, encubren... Muchos, muchos periodistas se han sentado al lado de él, sabían y han callado, o los han hecho callar", dice.
Petición al Ministerio de Igualdad
La modelo italiana ha pedido la intervención del ministerio de Igualdad en los programas de televisión que "revictimizan" y "frivolizan" la violencia machista. Insiste en la necesidad de una mayor responsabilidad mediática a la hora de tratar casos de violencia de género y reclama mecanismos de control o sanción para aquellos formatos televisivos que "banalizan el sufrimiento de las víctimas en nombre del espectáculo".