Cayetano y Eugenia Martínez de Irujo, más separados que nunca: estos fueron sus respectivos planes en el aniversario de la muerte de su madre

El 20 de noviembre de 2014 nos dejaba la duquesa de Alba para siempre. Desde entonces, su hijo Cayetano ha celebrado todos los años una misa en su honor en el día de su muerte. Y ayer, como era de esperar, ninguno de los hermanos del duque de Arjona asistió a la ceremonia de religiosa en recuerdo a la memoria de Doña Cayetana en el templo de la hermandad del Cristo de los Gitanos de Sevilla, del que era muy devota.

De riguroso luto, Cayetano Martínez de Irujo estuvo arropado por Bárbara Mirjan, su pareja, y sus amigos más cercanos. Los dos únicos asistentes importantes en la vida de Doña Cayetana que decidieron rendirle homenaje junto a su hijo fueron Alfonso Díez, viudo de la duquesa, y Carmen Tello, su íntima amiga. Este año, el duque de Arjona decidió no invitar a nadie personalmente, aunque las puertas de la iglesia estaban abiertas para todos aquellos que quisieran asistir a la misa en recuerdo de la duquesa.

Mientras se celebraba el oficio religioso en Sevilla, Eugenia Martínez de Irujo acompañaba a Narcís Rebollo a una conocida entrega de premios en Madrid. El marido de la hija de Doña Cayetana estaba nominado y la duquesa de Montoro no dudó en asistir a la velada de la mano de su pareja, dando plantón a su hermano en la misa celebrada en honor a su madre en el día de su muerte. A diferencia que el duque de Arjona, la madre de Tana Rivera deslumbró con un traje de esmoquin y se mostró muy feliz ante los medios que la esperaban.

Genoveva Casanova, expareja de Cayetano, sí que tuvo un recuerdo público hacia la que fue su suegra y decidió salir de su escondite para compartir una bonita publicación en Instagram en el día de su fallecimiento. La mexicana también fue una de las grandes ausencias de la misa en honor a Doña Cayetana pero apoyó al padre de sus hijos desde su exilio voluntario.

Los relación entre los hijos de la duquesa de Alba está rota y se encuentran más separados que nunca. Y ayer, en el aniversario de la muerte de Doña Cayetana, el duque de Arjona y la duquesa de Montoro decidieron recordar a su madre de manera totalmente distinta, separados a más de 500 kilómetros de distancia, y volviendo a evidenciar la mala relación existente entre ellos en una fecha clave para la casa de Alba.