Esta semana hay tres temas que han creado polémica y quiero dar mi punto de vista en esta crónica.

Hay algo en el tema de Ana Obregon que me molesta muchísimo. La sociedad todavía se muestra crítica y juzga a las mujeres que, por diversos motivos, deciden ser madres o abuelas por el medio de gestación subrogada en edades avanzadas, mientras que la paternidad en hombres mayores sigue siendo aceptada sin cuestionarse. Esta doble moral es muy injusta y refleja una brecha de género profunda en nuestra cultura. Las mujeres deberíamos tener la libertad de elegir cuándo queremos ser madres sin ser juzgadas o limitadas por la edad, al igual que los hombres.

La decisión de Ana Obregón es suya y solo suya. Es bastante absurdo que se haya convertido en un tema del que todos hablan. A ella le importa un comino lo que digan los demás. Es hora de abandonar prejuicios y valorar a las personas como seres individuales capaces de tomar sus propias decisiones. Si eres un hombre o dos hombres y utilizan para procrear un «vientre de alquiler» todos lo encuentran normal, llámese Miguel Bosé, Ricky Martin u otros muchos, más o menos anónimos, que todos conocemos. Pero si eres una mujer de derechas como Ana y un poco «pija», a la izquierda y al hipócrita Ministerio de Igualdad les entra un ataque de puritanismo insoportable criticándolo con fiereza.

Hablando de fiereza, así es como ha intentado desprestigiar y criticar el Gobierno a la compañía Ferrovial por su reciente decisión de abandonar España y trasladar su sede social a Holanda . Por cierto, decisión que ha sido aprobada unánimemente por sus accionistas en su reciente junta de este jueves. En el ámbito político ha desatado una gran polémica y enorme rabieta del señor Pedro Sánchez y su Gobierno. La mayoría de los ciudadanos consideramos que la decisión de Ferrovial ha sido motivada por la inestabilidad política y económica del país, así como por la falta de seguridad jurídica de un Gobierno que se dedica a penalizar con impuestos el crecimiento y la riqueza de los grandes empresarios.

La respuesta para disuadir a la compañía ha sido acusarla de falta de compromiso con el país y de poner en riesgo la creación de empleo y la inversión. Esta actitud me parece preocupante, poco inteligente y una visión poco realista de la economía. Revela autoritarismo y una consideración muy comunista considerando que las empresas deben actuar en función de los intereses del Estado, en lugar de tomar sus decisiones en función de los intereses de sus accionistas y rentabilidad de sus inversiones. Pedro Sanchez es tan arrogante y a veces necio que presume de no haber contestado a las llamadas del presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, desde hace 40 días, en lugar de reflexionar y tomar medidas para mejorar la seguridad jurídica y fomentar un clima de confianza y estabilidad que permita a las empresas operar con éxito y tranquilidad en nuestro país.

El tercer motivo de tensiones y opiniones diversas sin ningún sentido, es la llegada del Rey Don Juan Carlos para pasar unos días con sus amigos en Galicia. Después de años de críticas y controversias relacionadas con la monarquía y la corrupción que han rodeado al rey emérito, aún no se ha podido demostrar su culpabilidad en un tribunal. El respeto a la presunción de inocencia es un principio fundamental de un Estado de Derecho y su regreso a España debería ser visto como una forma de respetar este principio. El Rey Don Juan Carlos es una figura reconocida a nivel Internacional y su presencia en España incluso podría atraer turismo y negocio al país Su "exilio" en Abu Dabi es algo incomprensible para la mayoría de las personas de bien.