Tres vestidos de la princesa Diana, vendidos por 1,5 millones de euros en una subasta

Tres vestidos, incluidos diseños de Bruce Oldfield y Catherine Walker, que alguna vez fueron propiedad de la princesa Diana se han vendido en subasta por £1,3 millones, unos 1,5 millones de euros, al cambio actual. A pesar de su fallecimiento hace más de un cuarto de siglo, todo lo que algún día perteneció a Diana de Gales sigue interesando y aumentando su valor.

Esta semana, por ejemplo, se vendieron tres vestidos de la que fuera primera esposa de Carlos de Inglaterra, a cargo del canal de televisión de cine clásico Turner Classic Movies y la casa de subastas Julien's Auctions en California. Entre los lotes se encontraba un impresionante vestido de Bruce Oldfield que usó la princesa en el estreno en Leicester Square de la comedia Hot Shots de 1991, protagonizada por Charlie Sheen.

El segundo vestido fue un vestido blanco y negro sin tirantes de Catherine Walker que usó la princesa en un evento privado; y, el tercer vestido, era otro diseño de Catherine Walker, en color negro y jade que Diana usó en una cena de gala en el Hotel Royal York en Toronto en 1991. Los vestidos habían sido comprados originalmente por la empresaria Ellen Petho, quien los compró en Christie's, en una subasta celebrada en Nueva York en 1997.

Las tres piezas se vendieron como parte de la "Venta de Leyendas: Hollywood y realeza", una subasta que marcó los 100 años de la compañía cinematográfica Warner Bros. La subasta celebró tanto a la realeza británica como a la realeza de Hollywood en una venta diseñada para fanáticos del glamour. En la subasta también estuvieron a la venta atuendos usados ​​por estrellas legendarias como Greta Garbo, Lauren Bacall y Humphrey Bogart.

El vestido de Diana más caro jamás vendido fue subastado por Sotheby's a principios de este año. Se sabía que Diana había usado el vestido en público dos veces, una para un retrato de 1991 tomado por Antony-Armstrong Jones, el ex marido de la princesa Margarita . La otra vez, lo usó durante una sesión de fotos de Vanity Fair poco antes de su muerte en 1997. A principios de este año, ese vestido se vendió por £488,150, .