Preocupación

Última hora de Amador Mohedano: recibe el alta mientras buscan el origen del dolor y el sangrado

Los médicos han decidido darle el alta médica mientras determinan qué le sucede y qué tratamiento es el más adecuado para su dolencia

Amador Mohedano
Amador MohedanoGtres

El epicentro de la noticia ha vuelto a instalarse en los miembros de la familia de Rocío Jurado. Primero por la inesperada muerte de Michu, quien fuese pareja de José Fernando y madre de su hija Rocío. Ahora la familia de la gaditana y la de Ortega Cano está a la gresca por la custodia de la menor, además de muchos otros reproches que debaten antes en platós que en los tribunales. Mientras se trata de buscar la mejor solución para la niña, Amador Mohedano ha dado un susto a todos. Y es que el pasado viernes fue ingresado en el hospital y no había dado cuentas a nadie. Cuatro días hospitalizado sin que trascendiese la noticia. Este miércoles, al quinto día, ha sido dado de alta.

El exmarido de Rosa Benito se encontraba bajo cuidados médicos en el Hospital Universitario de Jerez de la Frontera desde el pasado día 18 de julio. No fue hasta este martes cuando se dio a conocer su hospitalización, aunque se mantenía el misterio sobre su dolencia. Desde ‘TardeAR’ se informaba que su hijo Salvador fue quien le llevó de urgencias ante su malestar y que los médicos decidieron mantenerle bajo observación. “Estoy en el hospital, estoy mejor, aquí con pruebas y con todo”, llegó a confesar el protagonista al citado programa. Ahora hay novedades.

La última hora sobre el estado de Amador Mohedano

Han sido muy pocos los detalles que han trascendido sobre su hospitalización. Tan solo que se encontró mal, su hijo Salvador le llevó de urgencias y que lleva cuatro días siendo sometido a diversas pruebas para determinar su estado y el mejor tratamiento. Se descarta que tenga algo que ver con su dolencia en la espalda, que tanto le ha maltratado los últimos tiempos. El motivo de su ingreso sigue siendo un misterio y se espera que en las próximas horas se arroje más luz al respecto. Se habla de la posibilidad de una úlcera, aunque aún no ha sido confirmado. Aunque parece que la familia ha optado por el silencio como única respuesta.

Desde ‘TardeAR’ han ofrecido la última hora sobre el paciente, que ya ha abandonado el Hospital Universitario de Jerez de la Frontera: "Se tiene que recuperar, está cansado. Han sido unos días agotadores, de muchas pruebas. Me pide que aclare que todo viene porque hace cinco meses tuvo una revisión muy importante en este hospital y desde este mismo hospital le han vuelto a llamar para hacerse la misma revisión. Esto lo que ha supuesto es que le hayan hecho varias pruebas. Está bien, como os digo, agotado. Otra cosa importante, Amador fue él mismo el que avisó a todos sus hijos del ingreso. Sabían todos sus hijos que estaba ingresado, pero es verdad que ha preferido no recibir muchas visitas".

Amador Mohedano en una imagen de archivo
Amador Mohedano en una imagen de archivoGtres

“Afortunadamente, su hijo estaba allí y le comentó que no se encontraba bien y decidieron trasladarle al hospital de Jerez de la Frontera. Han estado haciéndole pruebas, porque el verano pasado Amador también ingresó por una úlcera y ahora están viendo si solo se trata de una úlcera o es otra cosa distinta. Le están haciendo un chequeo en profundidad para saber de dónde vienen esos dolores de estómago y ese sangrado, que es lo que decían que tenía”, desliza Pepe del Real en el programa de Telecinco 'Vamos a ver'.

En el hospital ha recibido escasas visitas, pues el propio Amador Mohedano no ha querido alertar a los suyos con su dolencia. Su hijo Salvador le llevó al hospital y ha sido quien ha estado a su lado estos cinco días, acudiendo a la salida de su trabajo a su habitación para acompañarle. También una sobrina le ha estado relevando. Sus otros dos hijos no han hecho acto de presencia, aunque siguen su evolución y cada avance desde Madrid. Esta ausencia no se ha interpretado como signo de desgaste en su relación o falta de preocupación por su salud, sino una evidencia de que no se trata de nada grave, a pesar de la alarma de su ingreso a los 71 años.