Opinión

El diario de Amilibia: ¡Los palestinos te esperan, Yoli!

Sabe la vicepresidenta segunda que en tiempos de guerra viene bien una copita, pero aconsejará a los palestinos que cierren los bares antes de la una

Yolanda Díaz
Yolanda Díaz David JarLa Razón

La Yoli, vicetiple segunda, sigue firme en su intención de viajar a Palestina, porque «la visita de una vicepresidenta a ese país es de suma importancia», dice. Podría haber dicho que «es de Sumar importancia», pero no le cuadraba en ese momento. Sí ha añadido que «es importante el gesto porque es una vicepresidenta la que va a visualizar lo que está pasando allí, una auténtica oportunidad». O sea, que si fuera a Palestina la vicepresidenta primera, la Marisú, la visualización de lo que está pasando allí no sería la misma, pues sólo ella, la vicepresidenta segunda, es capaz de abrazar y besar como nadie a los niños palestinos y a los palestinos en general, con su melena al viento y su kufiya de diseño, y ya sabemos la enorme fuerza visualizadora que tiene todo eso.

El pueblo palestino está bien informado sobre España. Dicen que reciben las noticias del circo español como si fuera maná arrojado del cielo por el chef José Andrés. Creen que si la Yoli ha subido el salario mínimo merced al diálogo afectuoso y besucón con Garamendi, qué no podrá hacer con Netanyahu, tan ayuno de arrumacos y biquiños últimamente. Cuentan que Ione Bellarra e Irene Montero, en plan malmeter, han comentado en la intimidad que, ahora que se lleva tan bien con la industria hostelera, si viaja a Palestina debería hacerlo con un cargamento de empanadas de berberechos y quesos gallegos. Sabe la Yoli que en tiempos de guerra viene bien una copita, pero aconsejará a los palestinos que cierren los bares antes de la una. «Somos musulmanes, no bebemos alcohol», le dirán. «¿Y los judíos?». «Los judíos, sí». «Cabritos, siempre jugando con ventaja; esto hay que llevarlo a la ONU».

La Yoli tiene más fans en Gaza que en Galicia. Es la esperanza rubia de Hamas.