Opinión

Que no te los toquen más, Ábalos

Todo está más o menos pactado entre la víctima de los supuestos abusos, Ábalos, y el Apolo de la Moncloa, el tocador

AMP.-Ábalos comunica al Congreso su voluntad de presentar alegaciones al suplicatorio del TS y comparecer el 13 de enero
ÁbalosEuropa Press

Gran titular de LA RAZÓN: «No deberían haber tocado los cojones a Ábalos». Más: «Malestar en el Gobierno. Fuentes próximas al que fuera asesor del exministro de Transportes consideran que el Ejecutivo de Pedro Sánchez le ha condenado sin pruebas: solo les ha faltado fusilarlo». Cuentan las lenguas conspiranoicas que no pasa nada: todo está más o menos pactado entre la víctima de los supuestos abusos, Ábalos, y el Apolo de la Moncloa, el tocador. El Apolo hace que le toca un poco los mismísimos para quedar divinamente cara al público y el exministro no tira de la manta porque fuera del sanchismo hace mucho frío y además le han prometido que en el peor de los casos será indultado y rehabilitado. ¿Cómo se titula la película?

Yo, como buen cinéfilo, les ofrezco varios títulos y ustedes eligen, que para eso estamos en una democracia: «Las amistades peligrosas», «Atracción fatal», «La gran evasión» y «Lo que el viento se llevó». Mi vecina Carlota se inclina por «La máscara del Zorro» y yo por «Salvar al soldado Ryan». Pero, ¿qué necesidad tenía el Apolo de tocarle los dídimos a su ex mano derecha si para eso estaban los pisos con señoritas que pagaba Aldama? Luego está la cuestión sanitaria: una vez tocados, ¿temen ahora alguna infección por contacto? ¿Acaso puede contagiarse la corrupción por roce cojonero? Por si continuara el toqueteo, Mónica García debería recomendar el uso de profilácticos, guantes sanitarios y desinfectante. Y los más importante en este caso: ¿ha habido abuso sexual? ¿Consintió el exministro el toqueteo? ¿Qué dice la ley del «solo sí es sí» al respecto? ¿Protestarán airadas Irene Montero e Ione Belarra, aunque el abusado sea varón heterosexual? Tocamientos impuros ha habido, pero no se llegó a «El último tango en París», parece.