Londres

Los bancos suizos custodian más de 14 billones de euros de clientes extranjeros

Los clientes extranjeros privados representan un 42% de la fortuna total gestionada por los bancos helvéticos.

En el centro de la imagen, Bush durante la última reunión del G-20 en Washginton
En el centro de la imagen, Bush durante la última reunión del G-20 en Washgintonlarazon

Ginebra- Los fondos de los clientes privados extranjeros depositados en bancos suizos ascienden a unos 2,15 billones de francos suizos (más de 1,4 billones de euros), según los datos difundidos por la Asociación Suiza de Banqueros (ASB). La organización señaló ayer que no espera que se produzca una fuga de capitales después de que el pasado viernes pasado el Ejecutivo helvético anunciara una flexibilización del secreto bancario para algunos casos de clientes extranjeros.Esta suma es más del doble de la cantidad apuntada anteriormente por el Banco Nacional Suizo (BNS), que mencionaba un billón de francos suizos (más de 635.000 millones de euros). Ello significa que los clientes extranjeros privados representan un 42% de la fortuna total gestionada por los bancos helvéticos. La información, revelada ayer por la emisora «NZZ am Sonntag», fue confirmada por el portavoz de a ASB, Thomas Sutter.En total, los fondos depositados en Suiza ascienden a 5,2 billones de francos suizos (unos 3,39 billones de euros), lo que equivale a casi diez veces el Producto Interior Bruto de la Confederación. El portavoz de la ASB recordó que el Consejo Federal (gobierno) dejó claro en su declaración que el levantamiento del secreto bancario sólo se hará en casos en que haya fundadas sospechas de fraude fiscal y que la cooperación internacional en esa materia sólo se hará con condiciones estrictas.Los banqueros suizos señalaron que en la renegociación que Suiza pretende llevar a cabo sobre los acuerdos contra la doble imposición existentes con algunos países, como Reino Unido o Estados Unidos, para incluir las nuevas disposiciones sobre cooperación en materia fiscal, dichos países deben «hacer progresos respecto a sus propios paraísos fiscales».La Asociación de Banqueros confía, además, en que la adopción por parte de Suiza de los estándares de la OCDE no vaya a tener efectos retroactivos sobre los clientes ya existentes en los bancos suizos.El presidente suizo y ministro de Finanzas, Hans-Rudolf Merz, señaló anteayer, después de entrevistarse con el primer ministro británico, Gordon Brown, que con las medidas anunciadas no cree que Suiza sea incluida en la «lista negra» de paraísos fiscales de la OCDE de cara a la próxima cumbre del G-20 en Londres el 2 de abril. Merz viajó anteayer a Londres, donde se celebró una reunión preparatoria de ministros de Finanzas del G-20, para participar al margen de ésta y explicar la decisión suiza de adaptarse a las normas de la OCDE en materia fiscal para evitar ser señalada como paraíso fiscal.