Elecciones

Pistoletazo de salida de las primarias demócratas en Iowa

El «impeachment» castiga a los rivales de Trump. Sin un líder claro, el Partido Demócrata llega a los caucus con el mayor número de candidatos de su historia

Democratic 2020 U.S. presidential candidate Warren holds a Get Out the Caucus rally in Indianola
Imagen del interior del edificio donde se celebra el Caucus de Iowa REUTERS/Brian SnyderBRIAN SNYDERReuters

El histórico impeachment de Donald Trump, que tiene previsto finalizar la próxima semana en la Cámara Alta de EEUU con una votación final de mayoría republicana que exonere al presidente, no ha conseguido retrasar el calendario para el pistoletazo de salida a las primarias demócratas en Iowa. Popularmente conocidas como caucus, estas asambleas y primarias se celebran para seleccionar a los candidatos a la presidencia y vicepresidencia del país.

Pero la recta final para el arranque de las primarias demócratas comienza con la destacada ausencia de dos aspirantes clave a encabezar la marcha demócrata por la presidencia. Y es que los candidatos del ala más progresista del partido, Bernie Sanders y Elizabeth Warren, así como la otra apuesta femenina del “New York Times” a competir junto con Warren en los comicios, Amy Klobuchar, se han mantenido al margen de las primeras semanas de inicio de campaña electoral por su condición de senadores. El juicio político contra Trump les ha obligado a ocupar sus asientos del Capitolio en calidad de miembros del jurado.

Salvo la excepcional aparición esporádica de los senadores este pasado fin de semana en mítines electorales previos al arranque del lunes en Iowa, apenas se les ha visto en campaña. Algo que han sabido aprovechar los otros candidatos, de perfil más moderado, para recortar distancias y seguirles de cerca en la carrera de fondo del Partido Demócrata por la elección del que más opciones tenga a arrebatarle la presidencia a Donald Trump.

Candidatos demócratas
Candidatos demócratasAntonio Cruz

Es el caso de su rival principal, el ex vicepresidente Joe Biden y representante del establishment estadounidense; Pete Buttigieg, ex alcalde de una población de Indiana y el candidato más joven de estas primarias; o Andrew Yang, empresario de éxito sin experiencia política previa.

Recientes encuestas posicionan a Bernie Sanders a la cabeza de los candidatos demócratas en las primarias, con un Joe Biden que, con ocho puntos por detrás, le pisa los talones. Según una encuesta de “The New York Times/Sienna College” del pasado 20 de enero, Sanders, quien fue derrotado por Hillary Clinton en las anteriores primarias, lidera con un 25% el ranking demócrata, seguido de Pete Buttigieg con un 18% y de Biden con un 17%.

Pero la encuesta nacional más reciente, realizada por el Centro Pew del 6 al 19 de enero entre un total de 10,491 votantes registrados, revela otros datos que demuestran las consecuencias de la pausa impuesta por el “impeachment” a los senadores liberales. Y es que el 26% de los demócratas favorecen a Joe Biden en este arranque de las primarias en Iowa, quien estaría en la cabeza del ránking, el 21% a Bernie Sanders, el 16% a Elizabeth Warren, el 7% a Pete Buttigieg y, por último, el 5% al magnate de los medios Mike Bloomberg.

Según este último sondeo, Biden cuenta con una mayor ventaja sobre sus rivales demócratas entre los votantes de más edad, moderados y conservadores, que constituyen prácticamente la mitad del electorado, mientras que los demócratas más jóvenes y liberales dividen sus votos entre los candidatos del ala más a la izquierda: Sanders y Warren.

Además, menos de la mitad, un 44% de los encuestados, espera la victoria del candidato de su partido, mientras que el 34% se niega a expresar una opinión y el 22% se muestra más pesimista, al pensar que Trump vencerá en las elecciones. Entre los votantes republicanos, sin embargo, un total del 79% de los encuestados confía en que su presidente Donald Trump ganará la reelección en las presidenciales de noviembre.

Otro dato revelador de esta encuesta de “Pew” indica que Bernie Sanders, el candidato presidencial de mayor edad a sus 78 años, cuenta con una favorable ventaja entre los votantes demócratas hispanos, mientras que Joe Biden, el candidato con mayor experiencia en la Casa Blanca, lidera entre los demócratas negros y las mujeres.

Con un Partido Demócrata fragmentado, todavía sin un líder claro y un proceso interno que les ha llevado a competir con el mayor número de candidatos de su historia, el casi finalizado juicio político contra Trump mantiene el inicio de la campaña demócrata con un sabor descafeinado. El de los voluntarios desmotivados en la recta final de los intensos meses de trabajo por dar visibilidad a sus candidatos, ausentes ahora en Iowa.

Pero, a falta de su presencia, buenos son los familiares más cercanos y las nuevas tecnologías. Sanders participaba durante el fin de semana en la previa de la puesta en marcha en Iowa por teléfono, días antes de hacer su aparición ante un gran público movilizado, y su mujer daba la cara por él en su ausencia. Del mismo modo que el marido de Warren y su popular perro labrador, Bailey, han representado a la senadora, llevándose gran parte de su protagonismo en campaña.

Iowa se perfila como escenario de arranque y también, históricamente, de consolidación de candidatos. El estado del medio oeste del país, con 250 millones de votantes, representa más que la primera parada de las primarias demócratas el destino inicial que marca el rumbo y la trayectoria del posible vencedor. Un destino que culminará con la Convención Nacional Demócrata de 2020, prevista del 13 al 16 de julio en Milwaukee (Wisconsin).

Mientras tanto, en Washington, la votación final del “impeachment” para exonerar al presidente Donald Trump tendrá lugar, sin la presentación de nuevas pruebas ni testigos, el próximo miércoles a las 16 horas en el Senado, convirtiéndose así en el juicio político más breve de los tres celebrados en la historia de EEUU. Su destitución, anhelada por los demócratas, quedará anulada por la mayoría republicana de la Cámara Alta. Serán los votantes lo que tengan la última palabra en las urnas el 3 de noviembre. Y es que Trump se convertirá en el primer presidente que se enfrente a unos comicios después de haber sido sometido a juicio político.