América del Norte

López Obrador se jacta de que a México le ha ido mejor que a España en la pandemia

El presidente mexicano, el tercer país del mundo en fallecidos por coronavirus, da por iniciada la recuperación económica

López Obrador sería primer mexicano en usar la vacuna rusa contra COVID
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante la rueda de prensa de este lunesPresidencia de MéxicoEFE

Mientras México sufre los estragos económicos derivados de la pandemia de covid-19, el presidente Andrés Manuel López Obrador asegura que “ya inició la recuperación”. Y para certificar su “éxito” tuvo que referirse a España.

“Si se compara a México, vamos a decir con España -ofrezco disculpas a los españoles-, las dos crisis, la económica y la sanitaria, nos ha ido mejor a nosotros. Nuestros adversarios no van a aceptar nada, siguen como desquiciados, van a querer que haya más muertos”, denunció en su conferencia de prensa en el Palacio Nacional.

Pero para el líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), se debe “esperar” y no “adelantar vísperas” antes de ver el efecto definitivo de la pandemia en México. Remarcó que la estrategia contra la crisis está funcionando y ya se tocó fondo y “ya se inició la recuperación”.

Aplaudió que la inversión extranjera no se haya desplomado frente al año anterior en el primer semestre. Este domingo, la Secretaría de Economía informó que la inversión extranjera directa (IED) en México tuvo una caída anual de 0,7% en la primera mitad del año. Para el presidente, esta caída no fue “severa”.

Y reiteró que tras la pérdida de casi 1,2 millones de empleos formales, en agosto ya se está creando trabajo con más de 50.000 “nuevas contrataciones”.

"Es un indicador muy favorable de que vamos hacia adelante", dijo el mandatario, convencido de que funciona "su estrategia" tanto para enfrentar la crisis sanitaria como la económica..

Según los datos más reciente, la pandemia de covid-19 totaliza en México 522162 casos tras sumar 4.448 en la última jornada, lo que implica tres semanas de descenso en los contagios diarios. En total, el país acumula 56.757 fallecidos.

Mientras que en España -con una población menor a la de México- el país registra más de 340.000 contagios confirmados y 28.617 fallecidos.

Sin embargo, México es el tercer país del mundo con más muertes por coronavirus. Su tasa de mortalidad es la cuarta más alta de América Latina por detrás de la de Perú, Chile y Brasil. Incluso algunos días del mes, México llegó a ser líder mundial de defunciones por millón de habitantes.

En efecto, México se ha diferenciado de otros países por no hacer obligatoria la cuarentena o imponer toque de queda, y por no cerrar las fronteras aéreas. También se distinguió en la primera fase por ser uno de los que menos pruebas de covid-19 realizaba.

Francisco González, profesor de Política Latinoamericana de la Universidad John Hopkins de EE UU, involucrado en el análisis y diagnóstico para este centro de la emergencia en América Latina, califica de “muy deficiente” el manejo de la epidemia por parte del Gobierno de su país, pero cree que su implicación en el proyecto de la nueva vacuna podría permitirle dar un giro a su estrategia.

El trío negacionista del coronavirus

“A México, como a Brasil y Estados Unidos, les está yendo igual de mal por la ausencia de un liderazgo político efectivo, que inicia en los propios presidentes. Cuando López Obrador, Trump o Bolsonaro se burlaron de la pandemia y la menospreciaron, cuando siguen enviando mensajes contradictorios sobre la virulencia de la misma, no es posible que la sociedad responda y haga lo que se requiere durante la epidemia”, asegura González. “Es tan fácil como preguntarse: si está usando mascarilla el líder”, concluye.

Tanto AMLO (como se conoce a Andrés Manuel López Obrador) como Trump y Bolsonaro rehúsan las mascarillas, y aquí es como los padres con sus hijos. Los ciudadanos actúan y aprenden de lo que ven. El liderazgo empieza por la conducta del líder. No hay duda de que cuando se escriba la historia de la pandemia, liderazgos como los de AMLO, Trump y Bolsonaro se destacarán como lo que no se debería haber hecho.