La amarga victoria de López Obrador en México

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), se ha quedado lejos de su objetivo de obtener la mayoría cualificada de dos tercios en la Cámara de Diputados que le permiten aprobar cambios en la Constitución. El partido de López Obrador, Movimiento Regeneración Nacional (Morena), ha perdido la mayoría en el Congreso y dependerá de sus socios el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde (PV) para sacar adelante los proyectos legislativos.

Los resultados preliminares indican una pérdida de la mayoría absoluta en solitario de Morena tras pasar de 256 escaños a obtener entre 190 y 203 asientos. La suma de AMLO con sus aliados aglutina poco más de 300 diputados en el mejor de los escenarios, muy distanciados de los 334 asientos necesarios para aprobar cambios en la Carta Magna.

El presidente no va a tener la mayoría suficiente para desatascar, a través de una reforma de la Constitución, su reforma energética frenada por la Corte Suprema que desincentiva la inversión privada en el sector energético. La coalición opositora PAN-PRI-PRD de los partidos tradicionales de derecha, centro e izquierda respectivamente ha recuperado fuerza en el Congreso tras su descalabro en 2018. La alianza aumenta de 136 a 197 escaños convirtiéndose en un fuerte contrapeso a AMLO.

El proyecto de López Obrador amplía su poder territorial al obtener 10 de las 15 gubernaturas. Sin embargo, AMLO ha perdido su apuesta por gobernar el estado industrial de Nuevo León al norte del país. El candidato del partido del Movimiento Ciudadano (MC), Samuel García, se convertirá en el nuevo gobernador de este estado clave en la economía mexicana.

El profesor de Estudios Políticos de la Universidad Nacional Autónoma de México y Doctor en Humanidades, Rodrigo Peña, explica que ha triunfado la “campaña millennial” en las redes sociales de García junto a su esposa influencer, Mariana Rodríguez. La candidata de Morena, Clara Flores, sufrió una gran caída en las encuestas tras filtrarse un vídeo con el líder de la secta NXIVM, Leith Rainiere, condenado por tráfico de drogas, explotación sexual y pornografía infantil en Estados Unidos. Por el contrario, Morena vence en el estado de Guerrero pese a las acusaciones a su candidato, Félix Salgado, de agredir sexualmente a varias mujeres y ser sustituido por su hija Evelyn Salgado. Los resultados en Ciudad de México han sido un duro golpe para AMLO. Morena ha perdido cuatro alcaldías de la capital, el lugar que vio despegar políticamente a AMLO en sus años como Jefe de Gobierno entre 2000 y 2006.

La noche electoral estuvo marcada por las precipitadas autoproclamaciones de victoria de la mayoría de candidatos de los 15 estados que votaban a su gobernador. Pocos minutos después del cierre de urnas, el presidente de Morena, Mario Delgado, aseguró que sus datos les daban la victoria en 12 de los 15 estados. Tanto la candidata morenista como su rival del PRI se proclamaron ganadores en Guerrero cuando apenas se habían comenzado a contar los votos y faltaban dos horas para conocer los primeros recuentos. Varios aspirantes de MC y PRI-PRD también declararon sus triunfos en base a sus encuestas a pie de urna. Peña califica de “vergonzosas” las autoproclamaciones. Los partidos presionaban de esta forma al árbitro electoral. El consejero de Instituto Nacional Electoral, Ciro Murayama, criticó la “irresponsabilidad” de la clase política: “Hay que esperar a los resultados oficiales. Nada se gana enrareciendo el clima político con autoproclamaciones de triunfo”.

Las elecciones más grandes de la historia de México por número de cargos electos han supuesto triunfos tanto para el Gobierno como para la oposición. Sin embargo, AMLO se ve más perjudicado al haber quedado a mucha distancia de su gran objetivo: conseguir la mayoría de dos tercios en el parlamento. AMLO ha reiterado que consideraba “importante” lograr esta mayoría para sus proyectos legislativos en los tres años que le restan de mandato. Los resultados alejan la posibilidad de una reforma constitucional que permita a AMLO aprobar íntegramente su reforma energética y otros proyectos de su Cuarta Transformación. Peña destaca que el presidente mexicano se verá obligado a ser más dialogante: “Comienza la política. Va a tener que hacer negociaciones. Es una derrota para la Cuarta Transformación. No es una derrota total pero no han logrado la gran victoria que buscaban. El PT y el PV ganan peso. También deberá negociar con MC que va a funcionar como partido que negocia a izquierda con el Gobierno y a derecha con el bloque opositor. Hay condiciones para que haya una oposición razonable y responsable”.

Alta participación pese a la pandemia

La participación ha sido la más alta en unas elecciones de mitad de mandato en lo que va de siglo. Pese a la pandemia, el 52% de los mexicanos llamados a las urnas emitieron su voto. Las autoridades han celebrado que solo 30 de los 13.175 centros electorales no han podido abrirse. La intensa violencia política vivida durante la campaña no se ha reflejado con la misma magnitud durante la jornada electoral. Pese a ello, se han producido 21 incidentes violentos como agresiones a funcionarios, robo de urnas, ataques armados, secuestros y billetes volando a las puertas de los centros de votación.

México entra en una etapa política con la posibilidad de rebajar la tensión vivida durante los meses de campaña. Peña destaca que el nuevo mapa político contribuye a “mejorar la calidad y la profundidad del debate político mexicano”.