Afganistán

Los talibanes conquistan tres capitales en un día

Ya son 12 en una semana. EE UU insta a sus ciudadanos a abandonar Afganistán

Los talibanes conquistaron ayer tres capitales de provincia en apenas 24 horas. Qala-e-Naw, capital de la provincia noroccidental de Badghis, cayó en manos de los insurgentes. Lo que eleva a doce las capitales regionales caídas bajo control talibán en la última semana. Es decir, en casi un tercio de las 34 provincias que conforman el país, los talibanes tienen el mando. Horas antes se habían hecho con Herat, la tercera ciudad más importante de Afganistán y capital de la provincia occidental homónima. En este caso, se trata de una región «estratégica», como ha afirmado el propio portavoz talibán, Zabihulá Muyahid. Herat fue la segunda ciudad tomada ayer, tras la captura de la provincia meridional de Ghazni, como parte de su rápido avance en el país tras el inicio de la fase final de la retirada de las tropas extranjeras, el 1 de mayo. Precisamente entre la toma de Ghazni y la de Herat, EE UU había urgido a sus ciudadanos en Afganistán a que abandonasen cuanto antes el país ante el riesgo por el rápido avance de los talibanes. «La Embajada reitera que los ciudadanos estadounidenses deben salir de Afganistán lo antes posible usando el transporte comercial disponible y no planear depender de los vuelos del Gobierno estadounidense», indican en una nota de emergencia el Departamento de Estado. Y es que la última información revelada por los servicios de inteligencia estadounidenses sugiere que los talibanes seguirán presionando hasta invadir gran parte del país en los próximos 30 días y podrían tomar el control absoluto, como mucho, en otros 90.

Miles de personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares en las últimas semanas ante la amenaza de que el grupo islamista tome control del país e imponga un gobierno represivo radical, limitando el derecho de las mujeres y ejerciendo la violencia extrema contra la sociedad. Si bien la amenaza de los insurgentes se ha extendido mayoritariamente por las zonas rurales, su control sobre las capitales es cada vez más evidente, expandiendo el peligro con fuerza en Kabul durante los últimos días con violentos ataques.

Cuerpos diplomáticos han visto frustrados sus esfuerzos de lograr un acuerdo y las conversaciones de paz en Qatar continúan estancadas. Muchos se preguntan ahora qué ha pasado con los más de 830.000 millones de dólares que el Departamento de Defensa de EE UU ha invertido en Afganistán en los últimos 20 años.