Fuerte sacudida

Haití sufre un terremoto de 7,2 grados que deja ya 304 muertos

El primer ministro interino califica la situación de “dramática” mientras se teme que el país reviva la tragedia de 2010 tras un temblor que sesgó la vida de 300.000 personas

Haití ha sufrido un terremoto de 7,2 grados en la escala de Richter la mañana de ayer a las 8:29 hora local (14:29 hora peninsular española) que ha provocado la muerte hasta el momento de 304 personas y más de 1.800 heridos. El primer ministro interino del país caribeño, Ariel Henry, ha calificado la situación de “dramática” y ha confirmado “varias pérdidas de vidas humanas” en varias zonas del país más pobre de América. El epicentro del potente seísmo se encuentra a unos 8 kilómetros de la ciudad Petit Trou de Nippes, al oeste del país, a una profundidad de 10 kilómetros, informa el Servicio Geológico de Estados Unidos. El organismo norteamericano ha alertado de que “es probable” que el terremoto deje “un alto número de víctimas” y daños materiales “significativos”. Esta agencia norteamericana emitió una alerta de tsunami, ante la posibilidad de que el seísmo provocase enormes olas en el Caribe, pero fue desactivada más tarde. El seísmo fue más intenso pero se produjo a menos profundidad que el temblor de 2010, que causó 300.000 muertos y una de las peores crisis humanitarias del siglo XXI.

Los dos niños fallecidos han sido identificados en la población de Aquin, al oeste de la isla que Haití comparte con República Dominicana, junto a dos adultos que también perdieron la vida. Un quinto fallecido ha sido identificado en la cercana localidad de Nippes, ha informado el coordinador de protección civil, Fidel Nicolás, a la espera de la primera evaluación oficial de las consecuencias del seísmo. El hospital de Les Cayes ha recibido un gran número de heridos. La prensa local reporta importantes daños en las localidades de Sanit-Louis du Sud, Les Cayes y Jérémie.

Réplicas

Minutos después del terremoto, se ha producido una réplica de magnitud 5,2 a 17 kilómetros de la localidad de Chantal, de nuevo con origen a 10 kilómetros de profundidad. Este temblor se ha sentido durante unos segundos en la capital, Puerto Príncipe, a unos 130 kilómetros del epicentro. El hospital Saint-Antoine, uno de los más importantes de la zona afectada, se ha visto colapsado de pacientes. Necesita refuerzos de personal y medicinas para atender la emergencia.

El primer ministro interino ha dado orden de movilizar por completo “todos los recursos” del Gobierno haitiano para ayudar a las víctimas y ha apelado a la cooperación de la población para salvar el mayor número de vidas posibles en esta nueva tragedia que asola al país: “Extiendo mi más sentido pésame a los padres de las víctimas de este violento terremoto que provocó varias pérdidas de vidas humanas y materiales en varios departamentos geográficos del país”. Henry ha confirmado que la mayoría de los destrozos se han concentrado en el suroeste de Haití, concretamente en los departamentos del Sur, GrandÀnse y Nippes. El máximo mandatario haitiano ha asegurado que prepara un viaje a Nippes “para evaluar la situación en su conjunto”.

La movilización se produjo también en el extranjero. El presidente estadounidense, Joe Biden, autorizó hoy una “respuesta inmediata” de Estados Unidos al terremoto. Biden y la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, mantuvieron una videoconferencia sobre Afganistán con su equipo de seguridad nacional, en la que también recibieron información sobre el terremoto en Haití, explicó la Casa Blanca en un comunicado.

“El presidente autorizó una respuesta inmediata de Estados Unidos (al terremoto en Haití), y nombró a la administradora de USAID (la agencia estadounidense para el desarrollo), Samantha Power, como la alta funcionaria estadounidense encargada de coordinar este esfuerzo”, señala la breve nota.

Haití debe encarar una nueva tragedia humanitaria cuando todavía no ha salido de la crisis política provocada por el magnicidio del presidente haitiano, Jovenel Moïse, la madrugada del 7 de julio a manos de 28 mercenarios colombianos y haitiano-estadounidenses es un puzle incompleto lleno de interrogantes.

Haití lucha de nuevo por rescatar el mayor número de vidas posibles once años después del terremoto que provocó una ola amplísima ola de solidaridad mundial con este pequeño país caribeño de 11 millones de personas.