“¡Mariupol es nuestra”!: El vídeo de celebración de los mercenarios chechenos de Kadirov

El jefe político y militar de Chechenia, Ramzán Kadirov, ha publicado un vídeo en su cuenta de Telegram en el que aparecen decenas de soldados celebrando la supuesta toma de la ciudad de Mariupol, el enclave estratégico situado junto al mar de Azov que lleva bajo asedio ruso más de 50 días. ”¡Mariupol es nuestra!”, claman los soldados. Otras fuentes aseguran que este vídeo no está geolocalizado en Mariupol sino en otra zona de Ucrania.

En las últimas semanas, varios miles de soldados ucranianos y cientos de civiles se refugiaron en la planta siderúrgica de Azovstal, a las afueras de Mariupol. Las tropas rusas han sometido a los últimos reductos de esta ciudad a un intenso ataque en la acería, un espacio de once kilómetros cuadrados plagado de túneles y salas subterráneas de difícil acceso construido en los años treinta y cuarenta del siglo XX.

Kadirov anunció este miércoles que Mariupol caería ayer jueves a la hora del almuerzo. Kiev asegura que la ciudad portuaria sigue estando en manos de Ucrania. Rusia, en cambio, sostiene que ha acabado con la operación militar allí. Reconoce que existe un reductor de tropas ucranianas refugiadas en la acería de Azovstal, pero el propio Putin ordenó a sus tropas que dejen de bombardear esta planta siderúrgica y que mantengan un cerco estrecho a la zona para que “no entre ni una mosca”.

Kadirov, temido por sus brutales métodos, fue reclutado por Vladimir Putin al inicio de la guerra para que enviara a sus soldados a luchar en Ucrania. Las autoridades de Kiev han informado que Kadirov recibió la orden directa del Kremlin de acabar con la vida del presidente ucraniano Volodimir Zelenski. Sin embargo, en los últimos días las tropas mercenarias de Kadirov se han centrado en la batalla de Mariupol, donde miembros del batallón Azov, integrados en las fuerzas regulares militare ucranianas, plantan cara a los soldados rusos y sus aliados chechenos y sirios.

El Kremlin impuso a Kadirov como líder de Chechenia después de que el país quedara bajo control ruso tras una década de sangrientas luchas por la independencia. Actualmente es un aliado clave del presidente ruso y uno de los hombres más poderosos y temidos de Moscú. Grupos de derechos humanos lo han acusado de abusos como la desaparición forzada de opositores, la tortura y la persecución de homosexuales.